Madrid, 11 feb (EFE).- La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado hoy que no está en los planteamientos del Gobierno «en este momento» una reunión del jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, con el presidente del Ejecutivo catalán, Artur Mas.
En declaraciones a RNE recogidas por Efe, Sáenz de Santamaría ha respondido así a la pregunta sobre si es posible una reunión de Rajoy con Mas, y tras comentar que no está en los «planteamientos en este momento», ha dicho que lo que hay en el Congreso son varias iniciativas para pedir que «se transfiera» a la Generalitat «la competencia para convocar esa consulta».
Al respecto, ha comentado que la posición del Gobierno «es clara» al considerar que «esa consulta no entra» en lo que es el ordenamiento y es necesario «respetar» un derecho «del conjunto de los españoles», porque, ha explicado, se decide cómo «nos organizamos» a través de las fórmulas constitucionales.
A su juicio, se echa en falta en Cataluña una explicación por parte de su gobierno sobre «las consecuencias de una decisión de esa naturaleza» porque siempre se cuentan cosas «positivas» que se «contradicen» con las declaraciones de expertos en todas las materias o de líderes en la UE.
Preguntada por si Mas está amortizado políticamente, ha dicho que el presidente catalán «se ha metido en un debate y en una posición que hacen muy difíciles planteamientos de diálogo y de acuerdo porque parece concentrarlo todo en la consulta sin ninguna otra perspectiva», dando una «inestabilidad política que nunca es buena» y «él mismo se está abocando a un callejón que no tiene salida en los términos que él ha planteado».
«Se puede dialogar, llegar a acuerdos dentro de la Constitución, pero la consulta no es un asunto a acordar», ha precisado antes de comentar que el Gobierno «ni puede, ni quiere».
En relación a la imputación de la Infanta Cristina y su declaración ante el juez Castro el pasado sábado, ha dicho que el Gobierno «defiende la presunción de inocencia, hasta que un juez, un tribunal decida lo contrario» y «no merece un juicio anticipado».
Sobre si debería renunciar a sus derechos dinásticos, Sáenz de Santamaría ha argumentado que la Constitución habla del Monarca y de su heredero, el Príncipe de Asturias, de manera que son «los derechos que reconoce», por lo que el resto no sabe «si son expectativas de derechos».
Sobre la política antiterrorista y como parte de ella la penitenciaria, ha señalado que la misma «no va a cambiar» pero ha considerado «bueno» que el Gobierno de la Nación y el vasco «colaboren en temas que son importantes para los vascos».
Sobre el último comunicado de ETA durante el pasado fin de semana, ha dicho que el mismo «no dice, ni sirve absolutamente para nada» porque no supone un avance y es sólo para «hacerse notar».
En relación a la continuidad o no de Iñaki Oyarzábal como secretario general del PP vasco, la vicepresidenta ha dicho que no le corresponde a ella decidirlo, y ha comentado que «los militantes tienen que ser un elemento clave en este momento en la política vasca».
En un día en el que el Pleno del Congreso se pronuncia, con voto secreto, sobre la proposición no de ley del grupo socialista que pide la retirada del anteproyecto presentado por el Gobierno para la reforma de la ley del aborto, Sáenz de Santamaría ha dicho que la ley está en trámite de informes y que el Gobierno tiene el compromiso de «analizar las sugerencias de todos ellos».
«El PSOE siempre nos pide retirar, derogar o recurrir antes de tiempo. Las fotos más llamativas del líder de la oposición han sido pidiendo la retirada», ha señalado, refiriéndose a leyes anteriores, como la reforma educativa o la laboral, ha apostillado, antes de considerar que hay que buscar una ley que «alcance un grado de consenso suficiente».