Viena (dpa) – Pirueta, levada y piaffe: los lipizzanos de la Escuela Española de Equitación de Viena ejecutan todas las figuras de manera impecable. Más de 300.000 turistas al año asisten embelasados al entrenamiento matutino de la «Alta Escuela».
Ahora, una de las instituciones austriacas más respetadas ha llegado a los titulares después de que su Consejo de Administración haya nombrado a Sonja Klima, ex primera dama de Austria, para suceder a la respetada Elisabeth Gürtler como directora general.
Sonja Klima, conocida sobre todo por su compromiso social durante el gobierno de su ex cónyuge, Viktor Klima, quien fuera canciller de Austria entre 1997 y 2000, carece de la experiencia y los conocimientos que requiere el nuevo puesto y su nombramiento obedece a la presión política ejercida sobre la institución, aseveraron los cuatro miembros del consejo consultivo de la Escuela antes de renunciar por unanimidad.
Los expertos habían favorecido al experimentado jinete Herwig Radnetter, adiestrador jefe y con 40 años en la institución. El escándalo causado por el nombramiento de una experta en marketing como nueva directora de la tradicional institución revela la presión económica bajo la cual opera la empresa que administra la Escuela de Equitación.
Endeudada durante décadas, la antigua empresa estatal escindida en 2001 logró consolidarse económicamente en los once años de la era Gürtler. «Contamos con que esta tendencia continúe, y creemos que el nombramiento de Sonja Klima ha sido una buena decisión», dijo un portavoz del Ministerio de Agricultura, autoridad de la que depende la Escuela Española de Equitación. El ministerio rechaza además haber ejercido influencia en el nombramiento: «Tuvimos un papel meramente pasivo.»
El Consejo de Administración se ha decidido en favor de una candidata que tiene excelentes vínculos sociales y empresariales, además de haber demostrado su compromiso social por niños con enfermedades graves en su posición de directora general de la Fundación Infantil Ronald McDonald en Austria.
Sonja Klima, de profesión maestra, se mueve ahora en los círculos del Partido Popular Austriaco (ÖVP), de ideología conservadora, relacionándose con estrellas de la escena política como el canciller Sebastian Kurz y la vicegobernadora de Baja Austria Johanna Mikl-Leitner. Según señaló Klima, el canciller actual ha apoyado durante mucho tiempo sus proyectos sociales.
La nueva directora de 55 años está orgullosa de su historial como jinete. Amante de los caballos desde su infancia, participó y ganó en carreras de trote, dirige hace tres años un criadero de caballos con 50 animales y es propietaria de diez caballos.
«Conozco el arte de la equitación, pero no soy una jinete de Gran Premio», dijo sobre sí misma en el canal de televisión «oe.24». «El objetivo es encontrar patrocinadores», dice Klima sobre el futuro de la Escuela Española de Equitación. Además, quiere formar un equipo de jinetes experimentados para que la asesoren.
La Escuela Española de Equitación es una empresa con unos 200 empleados, tres sedes y una facturación de once millones de euros. «Los sementales de Viena ingresan lo que cuestan las instalaciones», dice la portavoz de prensa Andrea Kerssenbrock añadiendo que además tienen que mantener el centro de formación de Heldenberg y la caballeriza dedicada a la cría de los caballos en la ciudad de Piber. El establo de la institución cuenta con un total de 360 animales.
La ampliación del número de espectáculos a 90 al año por razones económicas ya había provocado la reacción de los críticos que consideran que la calidad del arte ecuestre se ve amenazada por la excesiva presión sobre los caballos.
Kerssenbrock respondió señalando que para para garantizar el descanso de los animales se había formado un segundo equipo de 28 caballos y ocho jinetes. «Siempre hay jinetes que son mejores que otros, pero los espectáculos siguen manteniendo su calidad», dijo la portavoz.
La Escuela de Equitación, que existe desde hace más de 450 años y pertenece al patrimonio cultural de la Unesco, quiere incursionar ahora en el mundo árabe. El equipo actuará por primera vez los días 14 y 15 de febrero en Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes Unidos. Según Kerssenbrock, los gastos de transporte de los 27 caballos en avión, 350.000 euros en total, corren a cargo de un patrocinador. «Habrá dos funciones, una para la familia gobernante y los invitados, otra para el público».
Michael Enzinger, portavoz del consejo consultivo retirado, confía en que los ánimos se calmarán pronto: «La comunidad de los caballos de doma es un círculo cerrado, y los que no pertenecen a él pasan desapercibidos, incluso siendo la directora de la Escuela de Equitación”, dijo al periódico austriaco «Die Presse».
La ex maestra está dispuesta a luchar con el viento en contra y dice confiada: «Creo que cuento con el apoyo de los jinetes».
Por Matthias Röder (dpa)
Foto: Herbert Neubauer/APA/dpa