MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) – El exministro y expresidente del Partido Popular catalán Josep Piqué se ha referido este jueves a la situación en Cataluña y ha reconocido que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tiene «un control de los tiempos» que no suele «compartir la mayoría del resto de los mortales», pero ha añadido que «no le ha ido mal en la vida siendo así», así que «le daría un margen».
Así se ha expresado Josep Piqué, en una entrevista en Antena 3 recogida por Europa Press, al ser preguntado sobre si el presidente del Ejecutivo estaría dejando pasar el tiempo en la crisis de Cataluña. «Yo hace mucho tiempo que he defendido que este tema no se arregla dejando pasar el tiempo o simplemente pensando que es una cuestión de distribución de recursos económicos», ha agregado.
En relación con la propuesta de la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, sobre un modelo de financiación que «limite» la solidaridad de Cataluña, Piqué ha admitido que se puede discutir el «momento», las «formas» y «algo que dentro de la presentación de la propuesta ha quedado, para entendernos, un poco flojo».
«A mí no me ofrece ninguna duda que las comunidades autónomas necesitan urgentísimamente un nuevo modelo de financiación. Yo ya hubiera empezado hace tiempo, pero cuanto antes empiecen mejor», ha indicado, para después advertir que «para que el planteamiento cuaje, nunca puede partir de la sensación de que se quiere un trato de favor».
Según el exministro ‘popular’ habría que plantear la propuesta diciendo: «Yo quiero una cosa buena para mí, pero que es perfectamente generalizable con los demás y que todo el mundo salga ganando».
En esta línea, ha manifestado que comparte «las críticas que se producen respecto a muchísimos excesos que se han producido en la España autonómica, en la España local», pero ha recalcado que hay que tener «siempre muy presente que la Constitución y los estatutos» establecen que los servicios básicos «dependen de las comunidades autónomas».
COMPARTE EL CRITERIO DE ORDINALIDAD
Así, ha explicado que, «como ciudadano», quiere que las autonomías tengan recursos «suficientes» para prestar servicios adecuados y que «de alguna manera estén blindados» y ha añadido que, aunque «España tiene que ser solidaria», lo que no puede ocurrir es que tras esta solidaridad, cambie «el orden de renta per cápita real» de cada autonomía.
Piqué cree que lo lógico es que «la financiación per capita de los servicios esenciales» se equilibre y si después «sobran recursos», haya «ciertos trasvases». «Hagámoslo desde el sentido común porque si no genera sensaciones de agravio. No es un debate que debería asustarnos», ha subrayado.
UNA CATALUÑA INDEPENDIENTE ES «IMPOSIBLE»
Por otra parte, ha asegurado que no se plantea una Cataluña independiente porque «hay cosas que no pueden ser y además son imposibles» y ha señalado que espera y desea «que las cosas se vayan reconduciendo hacia el sentido común».
«No tengo ninguna duda personal de que estamos mucho mejor juntos que en esa eventual separación y estoy absolutamente convenido además de que si aceptamos la hipótesis, las consecuencias económicas para los ciudadanos de Cataluña serían muy serias, muy graves, muy preocupantes», ha detallado.
Por último, Piqué ha pedido un «margen» para la política, frente a un tema que «se hunde en raíces muy profundas, en los sentimientos». «Hay que hacer política en el sentido de que la política con mayúsculas en buena medida es pedagogía, es planteamiento ideológico y político de poner argumentos encima de la mesa y de convencer a una gran parte de los ciudadanos de Cataluña de que no es verdad eso de que España nos roba y que es mucho mejor seguir siendo español», ha concluido.