Gijón, 27 ene (EFE).- La alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, ha asegurado hoy que la reforma de la Ley del Aborto promovida por el Ministerio de Justicia «no propicia el consenso social, sino la división».
«No responde a la expectación levantada y puede calificarse como una opción frustrada, cuando debía aspirar a aumentar el nivel de acuerdo político y social que acompañó a las anteriores regulaciones», ha señalado la regidora local a través de un comunicado tras la celebración esta tarde del Consejo de Mujeres.
Para Moriyón, una ley sobre la interrupción voluntaria del embarazo «debe basarse en el consenso social», para lo que, a su juicio, «es preciso» que el Gobierno de España «hable con distintos colectivos implicados, que requiera dictámenes de organizaciones profesionales y que integre diferentes puntos de vista».
«No es admisible plantear una ley de interrupción del embarazo, como una ‘ley de ministro’, porque estamos ante un problema complejo que afecta a muchas mujeres y muchas familias cada año», ha explicado.
Carmen Moriyón ha manifestado que «el hecho de que destacados miembros del propio partido del Gobierno hagan declaraciones críticas sobre el proyecto demuestra que carece del mínimo apoyo político y social exigible».
«Mientras no exista un anteproyecto real, concreto y singularizado sobre el que emitir un pronunciamiento claro y responsable, y tan sólo nos encontremos ante globos sonda y maniobras de artificio de los dos grandes partidos en este país para pulsar un debate previo a las elecciones europeas de este año, Foro no será partícipe de ello», ha dicho.
Por lo tanto, ante la declaración institucional presentada hoy por el PSOE en Gijón, la postura del equipo de gobierno «en este momento» es la abstención, con independencia de la postura que adopte una vez conocido oficialmente el documento sobre el que se va a legislar.
«Y sobre el que Foro manifestará su pronunciamiento cuando proceda, y todo ello, llegado el caso de que se iniciara dicho trámite de reforma», ha finalizado.