Oviedo, 15 ene (EFE).- La Confederación de Los Verdes han denunciado hoy la «negligencia y fracaso rotundo» del Gobierno del Principado de Asturias en la gestión de recuperación de la fauna salvaje y en concreto del oso pardo, algo que considera que ha quedado en evidencia con la osa «Molina».
El co-portavoz de Los Verdes, Joan Francesc Peris, ha afirmado que el Principado permitió el «acoso» de «turistas, curiosos, y en mayor parte por miembros de la Fundación Oso Pardo», al núcleo familiar de la osezna, compuesto por la madre y otro osezno, lo que a juicio de la formación pudo provocar que se resultara herida al despeñarse.
Peris ha lamentado que el Principado no haya incoado ningún expediente sancionador por la infracción del artículo 52.3 de la Ley estatal de Patrimonio Natural, que prohíbe «molestar o inquietar intencionadamente» a las especies de fauna salvaje, «pese a conocerse e identificarse a los infractores por la Guardería».
Asimismo, ha denunciado que, una vez rescatada la osezna herida, hubo personas que en la clínica veterinaria tocaron e interactuaron con el animal «ante la total pasividad de los responsables de la Consejería», a pesar de que el protocolo de recuperación de fauna para su devolución a la naturaleza exige evitar todo contacto humano.
«Como era de esperar, cuando se produjo la liberación, la osa estaba, no solo habituada al ser humano, sino que su comportamiento se había visto condicionado a dicha presencia», ha dicho Peris, para quien el Principado cometió otro «error» al liberar al animal en la reserva de Muniellos, «lejos de donde fue encontrada» y donde «quizá podría haber sido encontrada por su madre».
Por su parte, el secretario de Organización de Los Verdes, Toni Roderic, ha afirmado que, tras su liberación, la osezna fue amedrentada para que no se acercara a los núcleos habitados mediante petardos, gritos o persecuciones con perros, de modo que el animal, «aturdido, reaccionó a la defensiva, lo que dio pie a la los responsables políticos para declarar que constituía un peligro para los humanos» y «decretar su reclusión en un cercado».
A juicio de Los Verdes, la decisión se debe a la intención de mantener el «reclamo turístico local», puesto que una de las dos osas que habitan el cercado -Paca y Tola- «está ya próxima al final de su vida».
Por todo ello, Roderic ha considerado que «la actuación de los responsables políticos puede calificarse de secuestro y privatización del patrimonio natural».
Roderic también ha lamentado que la consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez González, de la que ha pedido su dimisión, «exigiera ser fotografiada con la osa Molina, incumpliendo personal y directamente el protocolo de recuperación».
Los Verdes considera que el Gobierno del Principado está «desoyendo» informes científicos que afirman que todavía se está a tiempo de rehabilitar y devolver la osa a la naturaleza.