La gota fría y la DANA que han asolada el sureste peninsular en las últimas semanas son fenómenos comunes para esta época del año en esa zona de España. A los miles de afectados, la virulencia de las lluvias les ha sorprendido solo en parte que ocurran estos fenómenos, pero de lo que no cabe duda es que los daños materiales y personales son prácticamente irreparables.
Los daños provocados por la DANA deben servir como motivo de alerta para el resto de comunidades. El otoño está a la vuelta de la esquina, y en esta estación del año son más habituales las lluvias.
En Asturias, una de las comunidades con mayor índice de precipitaciones, como ocurre con toda la cornisa cantábrica, la llegada del otoño es sinónimo de lluvias, incluso en años secos.
El orvallo tan característico de la comunidad obliga a equiparse en estas fechas, y no hablamos únicamente de ropa para el frío y las lluvias, sino también calzado. Las tradicionales madreñas, tan comunes en multitud de pueblos y que todavía visten muchos paisanos, no parece el tipo de calzado más cómodo para lucir en la ciudad, así que la mejor opción pasa por comprar unas buenas botas de invierno.
Los consejos para adquirir unas buenas botas de agua
En el mercado existen todo tipo de botas de agua, las que tienen diseños más básicos o las que presentan diversos estampados. Este factor es, quizás el menos relevante, siendo más importante la comodidad.
Para comprar unas botas de agua y acertar en la elección hay que elegir la caña que mejor se adapte a las piernas. Cuanto más alta es la bota, más protege de la lluvia. Por lo general, este tipo de calzado no ayuda a mantener el pie calentito, sino todo lo contrario. El mejor modo de evitar esto es utilizar calcetines gruesos, incluso de forro polar en los días en los que el termómetro registre temperaturas más bajas.
En territorios como Asturias, muchas personas optan por sustituir sus botas de agua por botas de montaña. Sea cual sea la elección, es fundamental que incorporen esos dos modos de protección: ante el agua en la zona de la planta y la parte baja, y ante el frío en la parte de arriba.
Y aunque ya estemos en pleno mes de septiembre y el otoño ya forma parte de nuestro día a día, lo que significa que no está abierto el periodo oficial de rebajas, si buscas bien puedes encontrar botas de agua para mujer baratas, a precio económico, especialmente en el comercio online.
Un último consejo, aunque este tiene más que ver con el outfit, es que las botas de agua quedan mejor con los pantalones pitillos.
¿Cómo conservar las botas de agua en buen estado?
Una vez se adquieran las botas de agua, priorizando los aspectos que cada persona crea consecuente: precio, color, botas más altas o más bajas, mayor o menor calidad… debemos saber que se trata de un calzado para ensuciarse, pero esto no implica que haya que ir pisando todos los charcos que encontremos y hacer un uso poco recomendable de las botas.
Tras su uso hay que limpiar las boras con un paño mojado en agua tibia y jabón neutro. Si estás muy mojadas se pueden meter en agua pero sin mojarlas por dentro, para que el barro ablande y se pueda eliminar fácilmente con un cepillo.
El paso siguiente a limpiarlas es secarlas con un trapo limpio y al aire libre, pero cuidando mucho que no le dé el sol de manera directa, pues los rayos solares secan y envejecen el caucho, provocando deformaciones.
Si tras unos usos, las botas comienzan a sacar un polvillo blanco, esto no es motivo de preocupación, pues es un proceso natural que sufre el caucho y que se denomina floración. En la floración, el material de la bota puede expulsar estas partículas blancas insolubles a la superficie.
¿Por qué renunciar al estilo cuando llega el mal tiempo?
Botas de agua estampadas, básicas, botas de montaña… sea cual sea la elección, la llegada del frío y el mal tiempo anima a mucha gente a dejar de lado el estilo, haciendo realidad ese refrán tan conocido de “ande yo caliente, ríase la gente”.
Sin embargo, otras personas no están dispuestos a renunciar a su estilo personal. Por eso, muchas chicas prefieren adquirir botas media caña mujer en lugar de las botas de agua.
Las botas de media caña garantizan protección al pie y confort. La menor impermeabilidad en alguno de sus modelos se ve contrarrestada con una mayor elegancia.
Estas botas, además, combinan muy bien con pantalones pitillos, vestidos y faldas, que son prendas muy habituales en esta época de entretiempo, hasta la llegada del mes de noviembre y las últimas semanas del año, que es cuando realmente llega el frío a la cornisa cantábrica.