MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) – Terry O’Neill siempre quiso ser percusionista de jazz, pero el azar cambió el rumbo de su futuro y se convirtió en uno de los fotógrafos que mejor inmortalizó la época dorada de los años 60 y 70, gracias a sus retratos de las estrellas del mundo del cine y de la música.
Figuras como David Bowie, The Beatles, The Rolling Stones, Mia Farrow, Brigitte Bardott, Audrey Hepburn, Marlene Dietrich, Ava Gardner, Clint Eastwood, Frank Sinatra, Rachel Welch, pero también personalidades de la política como Nelson Mandela o del deporte, como Pelé o Muhammad Ali, han sido el blanco de su cámara de 35 milímetros durante los últimos 60 años.
Ahora, el Espacio Fundación Telefónica se detiene en su trabajo con la exposición ‘El rostro de las leyendas’, más de 60 imágenes en blanco y negro y en color que podrán verse a partir de este viernes y hasta el 12 de enero de 2014.
El artista ha presentado este jueves esta serie de fotografías acompañado de la comisaria de la muestra, Cristina Carrillo de Albornoz, quien ha revelado cuál fue el detonante de esta exitosa carrera: un día, mientras O’Neill llevaba a cabo la labor de fotografiar a los viajeros que llegaban al aeropuerto de Heathrow, en Londres, O’Neill capturó, sin saberlo, la imagen de un alto mandatario británico.
A partir de ese momento comenzó a trabajar para el diario ‘Daily Sketch’ y poco después comenzó a retratar a las bandas de pop y rock más importantes del momento. Con apenas 21 años ya había fotografiado a los Beatles. «Eran cuatro personajes diferentes y todos muy agradables, tenían personalidades maravillosas», recuerda O’Neill.
MANDELA, RECUERDO IMBORRABLE
O’Neill se tomaba su tiempo para disparar una foto. Antes, esperaba a que los artistas le abrieran las puertas y entonces, cuando se mostraban sinceros y con la confianza suficiente ante él, el fotógrafo disparaba su cámara y creaba imágenes irrepetibles.
En el caso de Robert Redford, quien nunca ha escondido su terror hacia los objetivos, el fotógrafo esperó hasta dos días para poder captar una imagen suya. Otros, como Frank Sinatra o Elton John, mantuvieron una gran amistad e incluso en alguna ocasión le dejaron subir al escenario.
A pesar de la larga lista de estrellas que aparecen en sus fotografías, las cuales ha seguido tomando hasta la actualidad, O’Neill tiene claro que el personaje que más le ha marcado es Nelson Mandela. «Me conmovió tanto que cuando dejé de estar con él pensé que su persona merece todo el crédito posible», ha indicado.
Una de las imágenes clave de esta muestra es la última aparición de Marlene Dietrich sobre el escenario. «Ella no sabía que yo la iba a fotografiar», cuenta O’Neill. Tiempo después, la cantante le llamó: «Gracias, porque de otro modo no tendría un recuerdo de este concierto», le dijo.
Al igual que esta fotografía, Terry O’Neill ha inmortalizado instantes claves en la vida de las estrellas, como el momento en el que Paul McCartney toca el piano durante la boda de Ringo Starr o el posado de David Bowie para su disco ‘Diamond dogs’.