París, 29 sep (dpa) – Jean-Jacques Annaud debería ingresar al Libro Guinness de los Récords. Las películas de este director francés son de las más caras, espectaculares y valientes del cine europeo.
Se atreve a realizar producciones sin actores en los papales principales, como en «L’Ours», donde los protagonistas son dos osos, y transforma cientos de páginas de la literatura mundial en imágenes espectaculares, como en «El nombre de la rosa». («Il nome della rosa»).
Annaud, que este martes 1 de octubre cumple 70 años, ama los desafíos. Su proyecto más recientes es la adaptación cinematográfica del bestseller chino «Tótem lobo».
La novela escrita por Jiang Rong trata sobre un estudiante chino, que durante la Revolución Cultural viaja al interior de Mongolia para investigar la vida de los nómadas en la década de 1960. Pero entonces, los chinos quieren explotar económicamente la estepa.
Con «Tótem lobo», Annaud aborda una de las novelas más exitosas de la literatura china, que vendió unos 20 millones de ejemplares y fue traducida a más de 15 idiomas. El presupuesto de la cinta, que se rueda en Mongolia, ronda los 30 millones de dólares, de los cuales el 80 por ciento es financiado por chinos.
«Es una aventura increíblemente enriquecedora», dijo el director en una entrevista con la revista especializada «Le film français».
Annaud forma parte del grupo de los aventureros entre los directores de cine europeos. Busca su inspiración en países lejanos y en temas difíciles.
Desde su ópera prima imprimió su sello. «La victoire en chantant» es una sátira del colonialismo en la Primera Guerra Mundial, que fue rodada, entre otros, en Korhogo, en Costa de Marfil. En 1976 ganó con este film el Oscar a la mejor película extranjera.
Le siguieron otras empresas monumentales, como la adaptación a la pantalla grande del bestseller de 500 páginas «Il nome della rosa» («El nombre de la rosa») de Umberto Eco. El papel principal fue interpretado por Sean Connery.
En 1988 rodó la película de animales «L’Ours», en 1992 la adaptación cinematográfica de la novela de Marguerite Duras «L’Amant» y en 1997 «Seven Years in Tibet» («Siete años en el Tibet»).
Sus siguientes obras también fueron monumentales. El film sobre Stalingrado «Enemy at the Gates», la historia verdadera de un joven campesino ruso y un francotirador, costó unos 90 millones de euros (122 millones de dólares) y se convirtió en uno de los más costosos de Europa.
Los fracasos nunca asustaron al director. Lo que cuenta para él es el desafío.
Ahora volverá a medirse con «Tótem lobo», rodada en 3D y en mandarín, con un elenco y equipo mayoritariamente local.
Por Sabine Glaubitz