Con el verano recién iniciado, y en medio de la situación generada por la pandemia del COVID 19, en la que muchas piscinas públicas no abrirán sus puertas o lo harán con limitaciones importantes, adquirir una piscina desmontable cobra aún más sentido que en años anteriores. Pero no es esta la única razón para hacerlo, sigue leyendo y descubre algunas otras.
Las posibilidades de bañarse fuera de casa se han visto reducidas
Sin lugar a dudas, una de las consecuencias de la pandemia que estamos viviendo es que las posibilidades de darnos un refrescante baño fuera de nuestro domicilio se han reducido drásticamente, e incluso, en algunos casos han desaparecido.
Como consecuencia de ello, la adquisición de piscinas desmontables está convirtiéndose en un auténtico fenómeno, dado que permiten solventar la situación que acabamos de describir sin llevar aparejado un coste demasiado elevado y porque al final del verano pueden guardarse de forma que el espacio que ocupan pueda ser utilizado para otros menesteres.
Permiten que puedas tomar un baño justo cuando te apetezca
¿A quien no le ha apetecido darse un buen baño durante alguna de las calurosas noches de verano que toca vivir? ¿Cuántas veces has dejado de ir a una piscina pública porque te daba pereza salir de casa sólo para bañarte? ¿En cuántas reuniones veraniegas te gustaría haber podido ofrecer a tus familiares y amigos la posibilidad de refrescarse en una piscina?
Si se te han presentado estas situaciones, deberías saber que gracias a las piscinas desmontables en Carrefour, ahora puedes darte un baño en el momento que lo decidas sin tener que desplazarte a ningún sitio y permitiendo que quienes te acompañen en alguna velada veraniega, dispongan de la oportunidad de disfrutar de un baño refrescante. Así que ¿por qué no adquieres una de ellas?
Son perfectas para mantener entretenidos a tus hijos
Las vacaciones veraniegas, y todavía más las de este año a consecuencia de lo ya comentado anteriormente, son un momento en el que mantener entretenidos a los más pequeños de la casa es fundamental, y no conviene hacerlo utilizando una pantalla, pues en la infancia es indispensable el ejercicio físico.
Por este motivo, se puede decir que la adquisición de una piscina desmontable es sinónimo de brindar a tus hijos, y a sus amigos, la posibilidad de emplear sus horas de ocio de una forma activa y totalmente segura, pues no suelen ser demasiado profundas, algo que estamos seguros de que van a agradecer.
Son muy fáciles de montar y desmontar
Independientemente del modelo que elijas, una de las características que comparten todas y cada una de las piscinas desmontables que ofrece el mercado es que son extremadamente fáciles de montar y desmontar, por lo que no tendrás ningún problema en poder hacer uso de ella muy poco tiempo después de haberla recibido en tu casa.
De hecho, hay modelos en los que simplemente hay que hinchar el borde y van adquiriendo forma a medida que se llenan de agua, otros en los que sólo hay que ensamblar algunas piezas, y las más complejas, únicamente constan de paredes que hay que unir sin hacer demasiado esfuerzo, pues suelen ir numeradas y basta con seguir el orden que determinan las instrucciones.
Pueden guardarse en cualquier sitio y son bastante duraderas
Otra de las características más interesantes de las piscinas desmontables es que una vez desmontadas ocupan muy poco espacio, por lo que una vez terminado el verano, no sólo podrás volver a disponer de toda tu terraza, sino que no tendrás ninguna necesidad de plantearte dónde guardarla porque ello no supondrá ningún problema.
De hecho, hay quienes las depositan en un rincón de sus garajes e incluso se olvidan de su existencia hasta que llega el verano siguiente y vuelven a montarlas, dado que otro de los rasgos de identidad de estas piscinas es que pueden llegar a durar bastantes años.