Río de Janeiro/Guayaquil, 15 mar (dpa) – El joven delantero Vinicius, la nueva joya del fútbol brasileño y promesa del Real Madrid, fue celebrado hoy por su espectacular debut en la Copa Libertadores, donde marcó el doblete con el que el Flamengo derrotó 2-1 al Emelec en su visita a Ecuador.
«Vinishow», tituló el diario deportivo «Lance!» en Brasil, después de que Vinicius, de 17 años, fuera la gran estrella de la remontada del «Fla» en el tramo final del partido disputado en la noche del miércoles en Guayaquil.
El artillero fusiló primero al arquero de Emelec en el 77′ tras entrar al área esquivando rivales, y silenció siete minutos después definitivamente al estadio George Capwell con un potente zurdazo desde el borde del área tras una combinación con el centrocampista Diego Ribas.
«Es diferente. Es otra historia», celebró un comentarista del canal SportTV. «El chico subió una categoría ahora», agregó. «Vinicius va a llamar la atención».
«Decisivo e histórico», resumió el Flamengo después de que Vinicius se convirtiera en el jugador más joven en marcar por el club en la Libertadores, en el que fue además el debut del delantero en el máximo torneo de clubes de Sudamérica.
«Vinicus Arantes do Nascimento», celebraban también seguidores del Flamengo en las redes sociales, comparando a la nueva perla brasileña con «el rey» Pelé, Edson Arantes do Nascimento.
Otros bromeaban pidiendo que el Real Madrid, que fichó a Vinicius por 45 millones de euros (55 millones de dólares) el año pasado, aumente el pago por el atacante. Según el acuerdo entre ambos clubes, el jugador natural de Río de Janeiro debe seguir jugando en el Flamengo hasta 2019, antes de marcharse a Madrid.
El delantero carioca había recibido críticas en los últimos meses debido a las enormes expectativas puestas en él y, en comparación, las pocas grandes actuaciones que había tenido hasta ahora. Vinicius suele ser suplente todavía en el «Fla», como en Guayaquil, donde entró en el minuto 66 para decidir después el partido.
En casa empezaban a abundar las comparaciones con otra joven promesa de 17 años, Paulinho del Vasco da Gama, quien hacía quedar mal a Vinicius porque empezaba a brillar a menudo con su equipo en los torneos locales.
«Sólo estoy dando continuidad con los profesionales a aquello que ya estaba haciendo en la base», dijo ahora Vinicius tras el partido en Guayaquil.
«Mucha gente estaba criticándome, pegándome, pero yo siempre trabajo con la cabeza erguida. Con la ayuda de todos en el Flamengo hoy pude decidir la partida y hacer dos goles», agregó. En Madrid ya están al tanto sobre el nuevo nivel al que llegó el delantero.
Por Isaac Risco (dpa)