Oviedo, 21 feb (EFE).- El cantante Víctor Manuel, pregonero de las fiestas de San Mateo 2014, ha dicho hoy que no quiere «abusar» de sus amigos con una segunda sesión para la que «habría una reventa extraordinaria» del concierto «Cincuenta años no es nada», que ofrecerá el 12 de septiembre en Oviedo, entre otros, junto a Ana Belén, Miguel Ríos, Joaquín Sabina y Estopa.
El artista asturiano será el pregonero de las fiestas de San Mateo, cuyo programa incluye el concierto en el que conmemorará cinco décadas como compositor, periodo en el que ha creado más de 500 canciones.
El alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, ha anunciado en la rueda de prensa en la que ha estado acompañado por Víctor Manuel que el mierense será el pregonero de las fiestas patronales de la ciudad y ha subrayado que su actuación se convertirá en el «concierto del año en Asturias».
Ha añadido que el compositor de la letra «tengo una moza en Oviedo», incluida en uno de los temas de su primera época, «forma parte de la cultura musical» de la capital asturiana, en la que ha protagonizado el concierto «multitudinario» de inauguración del nuevo espacio construido en la losa de Renfe.
Víctor Manuel ha admitido que después resistirse «durante años» a dar pregones, que según ha revelado le llevó incluso a rechazar la petición realizada por un primo suyo para serlo en el municipio de Morcín, ha aceptado dar la salida en los festejos carbayones.
«Espero que me salga bien», ha comentado el artista, que ha descartado interpretar durante el concierto canciones pertenecientes a la etapa entre los años 1964-1967 porque, ha indicado, eran «muy malas».
Su actuación en la carpa instalada en La Ería, con capacidad para 10.000 personas, arrancará con temas vinculados al repertorio centrado en «El abuelo Víctor», «Paxarinos» o «En la planta 14» para continuar con una selección de su amplio repertorio como compositor.
Sobre el escenario ha adelanto que, a expensas de posibles altas o bajas que podrían producirse hasta la fecha del concierto, está confirmada la presencia de Ana Belén, Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Miguel Ríos, Estopa y los asturianos Chus Pedro, Marisa Valle Roso, Ramón Prada y José Ángel Hevia.
El propio Víctor Manuel propondrá a sus compañeros los temas que él ha compuesto y en el concierto interpretarán los amigos con los que compartirá actuación, y que según ha dicho le obliga a «hacer de guardia de tráfico» para adjudicar el repertorio.
«Habrá una banda poderosísima, con refuerzos, en una noche que para mí ya es maravillosa», ha dicho el cantante, que ha confesado que ya está «acelerado» ante el reto de «Cincuenta años no es nada».
El consenso político con el que la Sociedad Ovetense de Festejos ha dado el visto bueno a la actuación de Víctor Manuel ha merecido la satisfacción del cantautor, que ha atribuido a Enrique Granda la realización del concierto, al que asegura que planteó otras opciones «hasta que me rendí».
La presentación del concierto ha coincidido con el décimo octavo aniversario del fallecimiento del histórico dirigente comunista Horacio Fernández Inguanzo, al que el cantante mierense ha dedicado la canción «El paisano», cuyo tema ha reconocido que podría figurar en el repertorio a interpretar en Oviedo.
«Se me saltan las lágrimas, tengo recuerdos tan maravillosos de él», ha revelado Víctor Manuel al recordar a «uno de esos políticos que ya no existen».
Ha comentado que en los años de su mayor activismo político estuvo con Fernández Inguanzo en la cafetería del Congreso de los Diputados, en la «única ocasión» en la que estuvo en el Parlamento español, y visiblemente emocionado ha dicho que recuerda con absoluta claridad lo que estaba haciendo cuando conoció la excarcelación del hombre al que le cantó que «hasta las piedras, si hablaran, hablarían bien de Horacio».