(dpa) – Los juegos de búsqueda no solo divierten al perro y estimulan su desarrollo, si no que al mismo tiempo la mascota aprende a hacer algo útil.
Ya sea el teléfono móvil, las gafas o la llave de coche: mueva unos segundos el objeto delante del animal, luego colóquelo a la vista y dé la orden de búsqueda, aconseja como método de iniciación la revista especializada alemana «Ein Herz für Tiere» (número 12/2019).
Una vez que el perro encuentra el objeto recibe una recompensa, por ejemplo una golosina. Con cada logro, la búsqueda se va dificultando cada vez más. Finalmente, el animal debe confiar únicamente en su olfato para hallar el juguete o alimento escondido.
El juego de búsqueda de golosinas, en el que se esconden pequeñas porciones de comida en rollos de papel higiénico o periódicos, es muy apreciado por los canes.
También en este caso, la mascota al principio ve dónde se esconde la golosina, pero luego debe guiarse solo por su olfato.
Si al perro le gusta recuperar objetos, lo ideal es lanzarle una pelota. Pero solo debe devolverla tras recibir la orden «trae la pelota».
Se puede repetir este juego con otros objetos, siempre nombrándolos claramente por su nombre. Luego, en un segundo paso, se pueden poner dos cosas juntas, pero al emitir el comando de recuperación se debe mencionar uno solo de los objetos.