Melilla, 21 dic (EFE).- La Guardia Civil ha interceptado a un inmigrante que pretendía acceder a Melilla desde Marruecos oculto en el parachoques trasero de un coche.
Según ha informado hoy la Guardia Civil en un comunicado, un aparato detector de latidos permitió a los agentes detectar la presencia de una persona oculta, por lo que se registró el vehículo, en el que viajaban aparentemente dos personas.
El doble fondo en el que se encontraba el inmigrante, prácticamente aprisionado, estaba muy bien construido «en la oquedad del paragolpes trasero del mismo, que es de plástico».
Según la Guardia Civil, ante un posible accidente o alcance posterior al vehículo, el cuerpo del inmigrante constituía el paragolpes, ya que tan sólo lo protegía el «endeble» plástico de su estructura.
El inmigrante localizado, que dice proceder de Guinea, llevaba cintas para poder sujetar el peso del cuerpo, y tuvo que ser auxiliado, ya que presentaba síntomas de mareos y entumecimiento, dado el reducido espacio en el que había viajado.
Por su parte, los dos ocupantes del vehículo, dos marroquíes de 20 y 24 años, de iniciales M.J. y A.B., han sido detenidos y han ingresado en prisión por orden judicial como supuestos autores de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.