(dpa) – Cuando llega la época de vacaciones se alegran no solo los viajeros, sino también los ladrones. Al fin y al cabo, muchos departamentos y casas quedan vacíos y no tienen que temer ser sorprendidos cometiendo actos ilegales. ¿O sí? Siempre puede haber vecinos atentos.
Harald Schmidt, director de Prevención Criminal de la Policía en Alemania, aconseja acerca de lo que los vecinos pueden hacer por la seguridad mutua, y cuándo es mejor no intervenir.
dpa: ¿Es cierto que los ladrones observan durante cierto tiempo los objetos que merecen la pena?
Harald Schmidt: Eso es más bien raro, la mayoría de las veces se trata de decisiones aleatorias. Si una casa parece desocupada y sin seguridad, tocarán el timbre para ver si hay alguien en casa.
Las señales inequívocas de que la vivienda se encuentra deshabitada por largo tiempo son, por ejemplo, el buzón desbordado o las persianas bajas de forma permanente. Por eso es bueno que un vecino recoja regularmente el correo y suba las persianas durante el día. Encender las luces de noche también genera la impresión de que la casa está habitada.
dpa: ¿Los vecinos deben actuar si observan algo sospechoso?
Schmidt: No existe ninguna obligación legal, pero en un marco de buenas relaciones de vecindad, todos los residentes deberían vigilar sus alrededores. La Policía no puede estar en todas partes, depende de la colaboración de la población.
dpa: ¿Cómo pueden colaborar los vecinos de un edificio multifamiliar para garantizar una mayor seguridad?
Schmidt: Básicamente, las puertas delanteras, pero también las del sótano y el altillo o buhardilla deben estar cerradas. Si suena el timbre, no hay que limitarse a abrir la puerta de calle sin más, sino que antes se debe preguntar quién está tocando.
Si se observa que hay extraños en el edificio o que esperan en la calle o en un coche aparcado durante un periodo de tiempo prolongado sin motivo aparente, esto puede ser un indicio de posible delito. Entonces hay que reaccionar.
dpa: ¿Qué señales podrían indicar un robo en el barrio?
Schmidt: Luces parpadeantes y apantalladas en la casa del vecino, ventanas inusualmente cubiertas, pueden ser señales de que los ladrones están trabajando. O sonidos de trabajo de obreros en el edificio también pueden ser provenientes de un robo.
A veces, extraños llaman a los timbres de varios pisos. ¿Quizás quieran comprobar si hay alguien en casa? También son sospechosos los coches con matrículas extranjeras que circulan lentamente por la zona residencial varias veces. Posiblemente los ocupantes estén buscando un objeto que valga la pena.
dpa: ¿Hay que hablarles directamente a los desconocidos?
Schmidt: Depende de la situación. En un edificio multifamiliar se puede abordar directamente a los desconocidos y preguntarles si necesitan ayuda. Sin embargo, los vecinos que sospechen que se esté produciendo un robo en la casa o en el piso vecino deberían mantenerse alejados.
Entonces lo correcto sería llamar a la Policía y en lo posible tomar fotos desde una distancia segura, para ponerlas luego a disposición de la Policía. Importante: estas fotos no deberían difundirse en las redes sociales.
dpa: Como testigos, ¿a qué hay que prestar atención?
Schmidt: De gran ayuda sería observar bien al autor o autores del delito y memorizar todas las características posibles. Eso ayuda en la investigación.
Pero hay que evitar la confrontación directa con el ladrón. Nadie debería hacerse el héroe, eso podría acabar mal. Una vez que los autores han desaparecido, no se debe modificar nada en la escena del crimen.
dpa: ¿Qué ocurre si es un error y la persona que está en la casa del vecino está autorizada?
Schmidt: Las percepciones sospechosas deberían denunciarse siempre a la Policía, mejor una vez de más que de menos. No hay que tener miedo si se dispara una falsa alarma.
dpa: ¿Tiene sentido informar a todo el vecindario tras un robo en el hogar? ¿O eso crea pánico?
Schmidt: Para despertar una mayor atención acerca de los riesgos es ciertamente útil informar al vecindario sobre el incidente. Sin embargo, lo mejor es hablar con el vecindario en general sobre el tema de la seguridad. Por ejemplo, en una reunión de vecinos con representantes de la Policía.
En ella se pueden intercambiar números de teléfono. Así, antes de iniciar el viaje, se puede buscar ayuda directamente entre los vecinos si es necesario y comenzar las vacaciones con tranquilidad.
Por Katja Fischer (dpa)