Una de las infusiones de té más populares es la preparada con hojas de hierbabuena. Esta deliciosa bebida, con sabor dulce y mentolado, beneficia a la salud y deleita al paladar.
Los amantes del té disfrutan diariamente de las diferentes presentaciones de esta bebida deliciosa. La diversidad de infusiones disponibles en el mercado, no solo cuentan con sabores y aromas únicos, sino que además ofrecen beneficios distintos para la salud. Por tal razón, son un acompañante indispensable para la cena antes de acostarse a dormir.
El té de hierbabuena, por ejemplo, destaca principalmente por aliviar la indigestión y propiciar un efecto calmante que reduce las náuseas y vómitos. Combate el mal aliento, todo gracias a sus propiedades antibacterianas. Ayuda a relajar, siendo una bebida para consumir en momentos de estrés y ansiedad. Todo acompañado de un aroma dulce y un ligero sabor mentolado.
En la medicina herbaria tradicional, el té de hierbabuena se utilizaba principalmente por sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, mejorando la indigestión. Hoy en día, se usa más que todo por los beneficios psicológicos que ofrece: el disfrutar de una buena taza de este té mejora enormemente el estado de ánimo, relajando el cuerpo y llevándolo a un estado de calma y descanso.
¿Cómo preparar el té de hierbabuena?
El té de hierbabuena puede adquirirse en los supermercados, empacado en sobres muy prácticos, listos para su preparación instantánea. Sin embargo, todavía hay gente que lo prepara utilizando hojas secas de hierbabuena. Tan solo se colocan las hojas en el agua hirviendo, se tapa y se deja reposar durante 5 minutos. Cuando esté listo, se cuela y sirve la cantidad preferida.
Es también posible preparar el té utilizando hojas frescas de hierbabuena. Es necesario lavar bien las hojas para luego añadirlas al agua, y llevarlas a ebullición. Se deja hervir tapado entre 2 a 5 minutos, para luego apagar el fuego y dejar reposar la bebida entre 10 a 15 minutos. Finalmente, se sirve. El tiempo de infusión depende de la intensidad de sabor que se busque lograr.
El sabor del té de hierbabuena destaca por su perfume intenso, con toques de dulzura y mentol. Ni siquiera es necesario añadir azúcar para obtener un sabor agradable, pues su final es ligeramente dulce y vibrante. Se puede disfrutar tanto caliente como frío, siendo una bebida adecuada para todos los días del año, sin importar la hora ni el clima: no hay mal momento para un té de hierbabuena.
A pesar de su aroma fuerte y distintivo, muchas personas deciden combinar el té de hierbabuena con otros sabores. Es común añadir unas gotitas de limón para un toque cítrico, combinarlo con té verde para una paleta de sabores más complejos o prepararlo junto a semillas de chía. Otras variantes de recetas se consiguen al añadir canela, clavo, jengibre, entre otros ingredientes.
La popularidad mundial del té de hierbabuena
El té de hierbabuena no solo es inmensamente popular, sino que cumple un papel importante en las tradiciones de muchas culturas del mundo. En Marruecos, por ejemplo, este té se conoce como “té moruno” y representa hospitalidad, además de vida social. Se prepara añadiendo hojas de hierbabuena al té verde, en conjunto de bastantes cucharas de azúcar.
Países como China o Reino Unido tienen sus variantes tradicionales del té, pero cada vez más habitantes de estos lugares integran infusiones de hierbabuena en sus rutinas diarias. Los británicos, por ejemplo, cada vez más prefieren el té de hierbabuena frente a su autóctono té negro con leche, debido a que es una alternativa sin cafeína.
En general, el té de hierbabuena se ha incorporado en las tradiciones de té a nivel internacional, no solo por su sabor único y por sus beneficios para la salud, sino por su fácil accesibilidad: en cualquier mercado se encuentra disponible la infusión para preparar de forma instantánea, perfecto para consumir antes del trabajo o en una rica merienda junto a los familiares.