Madrid, 27 feb (dpa) – El Atlético de Madrid recibirá mañana al Leganés con la obligación de ganar para meter presión sobre el Barcelona, su rival del domingo en un encuentro decisivo para el título de la Liga española de fútbol.
El torneo ofrece en su vigesimosexta jornada la posibilidad de que el conjunto de Diego Simeone se marche a dormir a solo cuatro puntos del Barcelona, que el jueves visita a Las Palmas. No es algo en lo que muchos creyeran hace sólo un mes.
Sin embargo, Simeone es un maestro del credo. Si algo caracterizó al Atlético desde su llegada fue la adquisición de una fe inquebrantable. Como es ahora siquiera la posibilidad de poder luchar por el título de Liga.
«En los últimos 14 años siempre han salido campeón Madrid y Barça, salvo nosotros. Y en los últimos 14 años, sólo en 2008 el Villarreal quedó segundo. Estamos en un campeonato imposible para los que no somos Madrid y Barça», argumentó Simeone en un discurso meramente pragmático.
Pero luego continuó: «Tenemos que seguir en la línea. No miramos más allá de lo que nos entusiasma y nos potencia como equipo, que es no alejarnos del partido que tenemos por delante. Y después, más adelante, cuando queden cinco o seis fechas, ahí veremos qué situación podemos tener».
Lo cierto es que Simeone no renuncia a la Liga y así lo demostró en un reciente partido, cuando celebró un gol señalando a la grada con sus dedos: «Siete». Justo la distancia que le lleva el Barcelona a su equipo.
Naturalmente, todo pasa por ganar mañana al Leganés y luego llevarse los tres puntos de su visita al Camp Nou, donde el Barcelona permanece invicto esta temporada. Una misión más que difícil, aunque muy del gusto de Simeone.
El Atlético se reenganchó a la pelea por el título después de sumar cinco triunfos seguidos en la Liga española. El último fue en el campo del Sévilla con una goleada 5-2 en la que mostró su mejor versión: líneas juntas, presión alta, competitividad y pegada demoledora. Antoine Griezmann y Diego Costa están en su mejor versión y eso lo agradece enormemente el equipo rojiblanco.
Si acaso, la duda que surge ahora es ver si con 17 jugadores de campo será suficientes para poder pelear por la Liga española y la Liga Europa. El plantel quedó muy disminuido esta semana con las ventas de Yannick Carrasco y Nico Gaitán al Dalian Yifang chino.
«Veo un grupo corto, pero muy competitivo. Esto nos dará la posibilidad de que la mayoría tenga minutos y podamos distribuirlos de la mejor manera para potenciar al equipo, que es lo que nos importa», explicó Simeone.
El Leganés llega al Wanda Metropilitano en su peor momento de la temporada después de sumar cinco jornadas sin ganar, aunque hizo buen acopio de puntos en la primera vuelta y no tiene motivos para pensar en problemas para mantener la categoría.
El Valencia es cuarto clasificado y visitará al Athletic de Bilbao con el objetivo de seguir alimentando una racha que ya cuenta con tres victorias consecutivas.
Por su parte, el Villarreal defenderá su quinta posición en el campo del Éibar, mientras el Deportivo de La Coruña visitará al Getafe con la obligación de ganar para poder volver a pensar en la permanencia.
La jornada se completará con el duelo entre el Málaga y el Sevilla, un choque de rivalidad regional con diferentes urgencias para los dos equipos.
Por Alberto Bravo (dpa)