Llega el momento de ser madres y las dudas y temores no hacen más que acumularse dentro de nuestras cabezas, los nervios nos acechan ante la duda de no saber qué hacer o cómo actuar ante lo que se nos viene encima, que no es poco. Una nueva vida se enfrentará al mundo y nosotras somos la primera y más efectiva línea de defensa que tiene.
Uno de los principales temores a los que nos enfrentamos tiene que ver con todo aquello que concierne a la etapa de lactancia, la leche materna, la compatibilidad del ritmo y estilo de vida que llevamos con dar de mamar a nuestro bebé…
Para tranquilizar a las madres, diremos en primer lugar que nuestro organismo está más que preparado para aportar al bebé todo lo que necesita durante sus primeros meses con la leche materna, y que, por regla general, a no ser que nos encontremos en situaciones de mucho estrés o ante problemas genéticos, tendremos una leche de calidad que ofrecerle. Llevamos muchos cientos de miles de años haciéndolo y muy bien, así que para empezar, relájate y disfruta, tu organismo tiene todo lo necesario para que nada falle, solo sigue tu instinto.
La etapa de lactancia en las sociedades modernas
Los tiempos han cambiado, y aunque las mujeres estemos sobradamente preparadas para dar de mamar a nuestros hijos bajo condiciones extremas, debemos cuidar ciertos aspectos de nuestra salud, máxime cuando vivimos en un sistema social que nos acelera y limita el tiempo que estamos con ellos.
Pero, nuestro estilo de vida, no debe ser óbice para que nuestros pequeños no se alimenten de nuestra leche que, como hemos indicado, les procura en los primeros meses de vida todos los nutrientes y defensas que necesita para un buen desarrollo.
La lactancia materna no debe faltarles a nuestros retoños, y aunque no estemos con ellos todo el tiempo que necesitan, sobre todo cuando volvemos al trabajo después de la baja por maternidad, no hay motivo para no puedan alimentarse como es debido. Para eso contamos con los sacaleches eléctricos y en esta web, a la que accederás haciendo clic en este enlace, tendrás la más completa información sobre los sacaleches Medela, considerados los más seguros y eficaces.
De este modo, nuestro hijo estará siempre bien alimentado. Por nuestra parte, deberemos cuidar nuestra salud para que la leche que reciban sea de calidad, pues un ritmo de vida estresante o con un abuso de sustancias dañinas puede afectar seriamente a la leche materna, llegando a producir, en los casos más extremos, el cese de su producción.
Los tiempos están cambiando, no hay duda, pero las antiguas creencias de que necesitaba unos cuidados demasiado estrictos, como que salir de casa no era bueno ni para la mamá ni para el bebé, o los mitos creados alrededor de esta etapa, como que la madre tenía que comer para dos, que había que beber leche para producir leche, que no había que beber agua mientras se daba de mamar o que la cerveza aumentaba la producción de leche, han pasado a mejor vida.
Sí es cierto, en cambio, que una buena dieta siempre será beneficioso, aunque no hace falta que sea especial, solo con aumentar la cantidad de ingesta de frutas y verduras frescas habremos dado un gran paso. Si, además, añadimos una cantidad moderada de carbohidratos complejos, como son el pan, el arroz, las patatas o las legumbres mejor. También deberemos reducir a un par de piezas de proteínas animales al día, en el caso de que estuviéramos acostumbradas a más.
Reducir el consumo de grasa total, azúcares y productos refinados en general. Podemos llegar, sin preocuparnos, al medio litro de leche y derivados, y beber agua y zumos naturales, evitando los refrescos o los zumos embotellados, bebidas estimulantes como el café o los refrescos de cola, y por supuesto el consumo excesivo de alcohol y ningún tipo de droga.
En nuestras sociedades, en las que corremos, andamos, nos sentamos en pocos periodos de tiempo, sudamos o pasamos frío, dependiendo del lugar donde entremos o salgamos… sumado a los cambios de nuestro propio cuerpo, las ropas juegan un papel fundamental para nuestra comodidad y la del niño. Debemos llevar un sujetador amplio, mejor si está hecho de fibra natural, como el algodón, tirantes anchos y que la copa pueda abrirse fácilmente y con una sola mano.
Se recomienda que nos mantengamos sanas con la alimentación, pero también con la práctica de algún ejercicio, por ejemplo, dando largos paseos con el bebé, que además de ser bueno para nuestra salud al mejorar la circulación y activar el corazón servirá al pequeño para que despierten sus sentidos. Las deportistas pueden seguir ejercitándose, con la precaución de protegerse el pecho, si somos nadadoras cuidado de que el agua no esté demasiado fría.