Buenos Aires, 29 jun (dpa) – El 48,1 por ciento de las niñas, niños y adolescentes de Argentina es pobre, y de ellos, el 10,2 por ciento es indigente, según un estudio realizado por la Universidad Católica Argentina (UCA) a finales de 2017.
La pobreza en la infancia y adolescencia alcanza incluso el 54,2 por ciento en el llamado conurbano bonaerense, los suburbios de la capital del país, indica el documento «(In)equidades en el ejercicio de los derechos de niñas y niños. Derechos humanos y sociales en el período 2010-2017», presentado el jueves.
El estudio, elaborado por el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, detectó que entre 2010 y 2017 alrededor del 20 por ciento de las niñas, niños y adolescentes tuvo problemas de acceso a alimentos en las zonas urbanas.
Además, en el último año la «situación de privación en el acceso a los alimentos en cantidad y calidad por problemas económicos» resultó «severa» en el 9 por ciento de los casos.
Según la UCA, los problemas se dieron incluso coincidiendo con una caída de la pobreza del 6 por ciento entre 2016 y 2017 y cuando el Gobierno del presidente, Mauricio Macri, incrementó en 4,1 por ciento la ayuda alimentaria directa.
«Aun cuando mejoraron los índices de pobreza económica y se incrementaron las acciones alimentarias directas, la situación de inseguridad alimentaria se mantiene estable», indicó el informe.
El documento destacó además que «la mitad de la infancia en la Argentina tiene como única opción para la atención de la salud el sector público», y que en 2017 dos de cada diez niñas y niños no asistieron al médico.
La mitad de las niñas y niños que viven en zonas urbanas de Argentina reside en zonas nocivas en términos de la contaminación ambiental, algo que no se modificó en el período 2010-2017 y afecta en mayor medida a los sectores sociales más vulnerables.
Las viviendas que habitan, por su parte, no tienen acceso a los sistemas de agua de red y desagües.
En tanto, el documento resaltó que cuatro de cada diez niñas y niños no tienen libros infantiles en sus hogares ni tampoco escuchan de sus mayores cuentos e historias orales. El vínculo con el libro en los sectores más vulnerables comienza en la escuela.
En tanto, casi el 15 por ciento de las niñas y niños tampoco celebran su cumpleaños.
Según cifras oficiales, el 25,7 por ciento de la población argentina se encontraba en situación de pobreza durante el segundo semestre de 2017. La cifra representó una caída de casi cinco puntos en un año y 6,5 puntos por debajo del registro de septiembre de 2016.
Al asumir el cargo, Macri dijo que su objetivo sería orientar su Gobierno hacia la «pobreza cero», el indicador según el cual debería ser evaluada su gestión.
Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social de la UCA, auguró días atrás que la pobreza volverá a aumentar este año a causa de la aceleración de la inflación, la devaluación y la retracción del mercado laboral.