Muguruza y Sharapova reeditan un viejo duelo en París

París, 5 jun (dpa) – La Garbiñe Muguruza que Maria Sharapova se encontrará mañana en los cuartos de final del Abierto de tenis de Francia es muy distinta a la que derrotó las tres veces que se enfrentaron, una de ellas en París, también en cuartos, hace cuatro años.

En ese torneo, Muguruza dio su primer aviso al mundo al vencer a la estadounidense Serena Williams, que defendía el título, en la segunda ronda. Las sorpresas no parecían terminar allí, porque a Sharapova la apabulló en el primer set.

Sin embargo, la nacida en Caracas pagó su falta de experiencia y Sharapova terminó remontando 1-6, 7-5, 6-1 en más de dos horas de partido. La rusa ganaría en aquel 2014 su segundo Roland Garros, su último Grand Slam hasta ahora, frente a la rumana Simona Halep.

Mucho ha cambiado desde entonces. Muguruza, actualmente número 3 del ranking, ganó en la Porte d’Auteuil en 2016 y un año después, en Wimbledon. Hoy, a sus 24 años, es una de las figuras más importantes del circuito femenino.

«La última vez fue hace tiempo, sí que es cierto que han cambiado muchas cosas», reconoció la española, que llegó a los cuartos casi sin jugar tras el retiro de la ucraniana Lesia Tsurenko.

«No siento que saldré a la pista con una mentalidad diferente, saldré con mis opciones a ganar», explicó. «Pero sí fue hace mucho tiempo, la verdad».

El historial de tres derrotas ante Sharapova parece, en ese sentido, un poco mentiroso: la última vez que se enfrentaron fue en Montreal hace casi cuatro años. Y mucho cambió también para la rusa desde entonces.

La campeona de cinco Grand Slam volvió en abril del año pasado después de una sanción de 15 meses por doping. No fue un regreso fácil. Debió recuperar confianza, juego y no pocas posiciones en el ranking.

Pero en París, desde hace una semana, Sharapova avanza con contundencia. El sábado en tercera ronda, por ejemplo, se deshizo 6-2 y 6-1 de la checa Karolina Pliskova en apenas 59 minutos.

Si la lesión de Serena Williams antes del encuentro de octavos evitó un nuevo episodio de una gran rivalidad, ante Muguruza será una buena prueba. La rusa quiere terminar de volver, decir presente, afirmar que no es una figura del pasado, que aún tiene cabida en el circuito.

Ganar en París por tercera vez sería una formidable manera de mandar el mensaje, aunque para ello deberá ganar primero mañana a Muguruza, que es el presente pleno.

«Es una rival muy sólida, intentaré jugar mi mejor tenis», dijo Muguruza, siete años menor que la rusa. «Tenemos un juego parecido las dos, a ver quién toma la iniciativa», concluyó la española, que busca un nuevo título en la arcilla parisina.

Por Manuel Dueñas (dpa)