Categoría: Gastronomía

  • «Los mejores vinos del mundo» despiden la IX Ruta del Cocido Madrileño

    «Los mejores vinos del mundo» despiden la IX Ruta del Cocido Madrileño

    ‘Los mejores vinos del mundo’ despiden la IX Ruta del Cocido Madrileño, que concluye este domingo 31 de marzo. Como colofón, la sumiller palentina Ana Belén Toribio ha seleccionado los maridajes de los cuatro vuelcos del emblemático plato regional: para la croqueta de pringá, champagne Taittinger Brut Réserve; manzanilla ‘La Guita’ con la sopa de fideos; para los garbanzos y verduras, el Ribera del Duero Malleolus 2015, de Bodegas Emilio Moro; y Rioja CVNE Imperial Reserva 2014 con las carnes o viandas.

    Desde el 14 de febrero, 43 restaurantes de toda la Comunidad de Madrid celebran la gran fiesta anual del cocido madrileño. Ésta su novena edición lleva servidos más de 30.000.

    Ana Belén Toribio presentó los maridajes en La Clave (Velázquez, 22), que participa por segundo año consecutivo en la Ruta del Cocido Madrileño. Presidieron el acto Alberto de Prado, director del certamen; Tomás Gutiérrez, presidente de la asociación ‘Hostelería Madrid’; y su hija Ainhoa Gutiérrez, directora del restaurante. Entre otros expertos, ratificaron los maridajes la química y enóloga Isabel Mijares, el enólogo y sumiller Jesús Flores, Florencio Sanchidrián, embajador mundial del jamón ibérico; Javier Moro, Gerente de Bodegas Emilio Moro; y José Masaveu, Director General de Masaveu Bodegas.

    El selecto póker de vinos del cocido madrileño puede maridarse de lunes a domingo durante todo el año en La Clave. Su célebre cocido en cuatro vuelcos se sirve por 28€ (sin pan, bebida ni postre) y cada vino a su precio de carta. El Club de Amigos del Cocido puntúa el cocido madrileño en cuatro vuelcos de La Clave con la nota media más alta de España, 8’55 sobre 10. El club ha catado más de 270 cocidos en 28 años. Además, La Clave es el primer restaurante cuya carta marida cocido con champagne: 49€ por persona, cocido para dos con una botella ¾ de Taittinger Brut Réserve.

    Cuatro uvas para un cocido
    Champagne, manzanilla, crianza, reserva etc. De los lluviosos viñedos de Reims a la brisa salina de los pagos de Sanlúcar, las blancas Chardonnay y palomino fino. Del curso del Duero junto al castillo de Peñafiel a La Rioja Alta, tinta fina y tempranillo. Cuatro bodegas. Sin salir del mismo plato, cuatro tipos de uva dialogan con los sabores regionales de la tierra y sus animales.

    El chef toledano Pepe Filloa rescata una tradición serrana casi olvidada: la croqueta de pringá, elaborada con el tocino, el chorizo y la morcilla sobrantes del cocido. Este “peterete” (así lo define Guillermo Piera, Presidente del Club de Amigos del Cocido) es el primer vuelco. “El carbónico vivaz y chispeante del champagne equilibra el intenso sabor de la croqueta, en una combinación de elegancia y rusticidad”, apunta Ana Belén Toribio.

    Con un 40% de uva Chardonnay (el porcentaje más alto en vinos espumosos), el Taittinger Brut Réserve presenta notas cítricas y frutales, a pera y albaricoque, “complemento perfecto para los componentes grasos de la croqueta”, con recuerdos de brioche, mantequilla y nata.

    Cebolleta y guindilla acompañan la sopa de fideos cabellín, calentita y desgrasada. Las notas salinas de la manzanilla refrescan así un sabroso caldo que recoge la esencia de garbanzos, verduras y carnes. “El regusto amargo pero agradable de la uva sanluqueña alarga el matrimonio entre tierra y mar”, subraya Ana Belén Toribio.

    La brisa impregna de sal marina los viñedos y bodegas del microclima jerezano de Sanlúcar de Barrameda. ‘La Guita’ procede de palomino fino 100% del Pago de Miraflores. Cuatro años de crianza biológica bajo el velo de flor cristalizan en una lágrima de mar soleado, con aromas florales, a hierba e hinojo, balsámicos y anisados, en boca entrada suave, retazos de frutos secos.

    Tinta fina y tempranillo

    El tercer vuelco agrupa los productos de la tierra: garbanzos de La Moraña (Ávila), repollo, zanahoria, cachelo de Lugo, relleno y salsa de tomate. 18 meses en barrica de roble francés Allier estructuran el Ribera del Duero Malleolus 2015, vino de alta expresión, “esencia de Emilio Moro”.

    “Potente en boca, de retrogusto largo y persistente, su tanino sedoso aviva la legumbre y las verduras, sin solaparlas”, apunta Ana Belén Toribio. Bien acabado y redondo, rojo cereza, en nariz fragancia frutal de la tinta fina, enriquecida con matices de madera noble y especias.

    De color cereza picota con ribete escarlata, en nariz frutos de bosque y fruta roja, incluso apuntes a regaliz con tomillo, romero, clavo y hoja de puro, su aromático manto arropa las viandas: morcillo de ternera joven asturiana, tocino, morcilla y chorizo ibéricos, gallina campera, hueso de jamón de bellota y hueso de caña con tuétano.

    De postre, se sirvió coulant de chocolate con helado de mango, en armonía con Sidra de Hielo Valverán 20 Manzanas, cortesía de Masaveu Bodegas.

    Ana Belén Toribio

    Ana Belén Toribio recuerda las palabras de Josep ‘Pitu’ Roca, sumiller de El Celler de Can Roca: “El sumiller gestiona su propia vanidad, ya que ejerce de puente entre los que hacen el vino y los que lo reciben”. “A unos y otros debe el mismo respeto”, añade la también periodista gastronómica, directora de Gastroystyle.com, Miembro de la Asociación Madrileña de Sumilleres y de la Asociación Española de Periodistas y Escritores del Vino, le avalan 10 años de experiencia en el campo enológico.

  • La verdad sobre los alimentos afrodisíacos

    La verdad sobre los alimentos afrodisíacos

    (dpa) – ¿Seducir al otro gracias a las frutas y verduras? ¿Realmente predispone al acto carnal andar picoteando en la huerta? Elvira Grudzielski dice que sí. Es especialista en hierbas y escribió el libro «Recetas sensuales para horas gratas». Según dice, el alimento más potente de la cocina amorosa es la piña (ananá), ya que pone de buen humor y predispone a la sensualidad. Lo mismo rige para las uvas, cuyo azúcar va directo a la sangre y da energía.

    La palabra «afrodisíaco» se deriva de Afrodita, la diosa y experta del amor, la belleza y el deseo en la mitología griega. A hierbas, especias y comidas se le atribuyen efectos erógenos. «Son potenciadores naturales», dice la alemana Grudzielski. Ya su bisabuelo era experto en hierbas y ella continúa con la tradición. «Echar mano de las hierbas puede tener el mismo efecto que las pequeñas pastillas azules», asegura.

    La autora estudió usos y costumbres antiguos y recuerda dichos populares como que un poco de nuez moscada en el vino alimenta la pasión. También recuerda que antes de un banquete, Afrodita frotó las mesas con menta fresca para generar un ambiente relajado y con buen espíritu.

    Esto permite pensar que los afrodisíacos lo pueden todo, desde despertar un deseo dormido hasta desatar la pasión. «En todo el mundo hay varios cientos de plantas a las que se les atribuyen efectos afrodisíacos», confirma Johannes G. Mayer, director de un grupo de investigación que estudia la medicina de los monasterios en la universidad de Wurzburgo, en Alemania.

    El ginseng y el chile parecen ser los más exitosos, aventura Mayer. Sin embargo, el experto aclara que esto tiene que ver más bien con el ámbito de las especulaciones, la fe y la transmisión de saberes populares y señala que por ahora no hay pruebas científicas de todo esto.

    También el experto en alimentación Uwe Knop señala que el plato es más bien un crisol de emociones. «Sin comida no existimos. Quizá podemos existir sin sexo, pero entonces la vida es menos bonita», opina el investigador. Afirma que la comida y el sexo son maravillosos y deben ser disfrutados.

    Sin embargo, para Knop no hay ninguna constancia de que la comida sane, energice o vuelva sexualmente atractivas a las personas. Lo que Knop no descarta es que a veces el verdadero afrodisíaco sea la pareja.

    La sola convicción en cuanto al poder de la hierba puede generar un efecto, sobre todo cuando son los bloqueos anímicos los que impiden el deseo. El historiador de la medicina Mayer dice que ya en la Edad Media, hombres y mujeres tocaban a las puertas de los monasterios para pedir un «empujón» de la huerta.

    El «Macer floridus», un poema del siglo XI, era considerado una obra clásica del arte de la sanación mediante las hierbas en Europa Central. En él, la ortiga es descrita como afrodisíaca. «Tomar su semilla con vino despierta el amor, y aún más si rallas la planta, la mezclas con miel y pimienta y la tomas con el vino», afirmaba.

    Entre los autores de la medicina de los monasterios, sólo Hildegard de Bingen advirtió acerca del «embrujo amoroso que pueden causar algunas plantas, como la árnica y el cardo bendito».

    En el caso de algunas plantas, los expertos creen que su forma así como su flor pueden tener un efecto afrodisíaco. «Los espárragos, las zanahorias y el rábano parecen creados para el ámbito erótico», dice Mayer. Pero, como ya se dijo, su efecto no está demostrado.

    Por Katja Wallrafen (dpa)

    Foto: Mascha Brichta/dpa-tmn 

  • smöoy presenta la radiografía del consumo de yogur en España

    smöoy presenta la radiografía del consumo de yogur en España

    Según el barómetro smöoy, el yogur favorito de los españoles es el cremoso o en su defecto los griegos (según datos de una encuesta realizada por We are testers en 2018). Los yogures de sabores ocupan el segundo puesto, mientras que los naturales el tercero. Por último están los yogures con trozos de fruta.

    Según estos mismos datos obtenidos por smöoy, el 87,5% de los españoles asocian el yogur con un postre para después de comer o cenar. De hecho el 96% de los consumidores consideran el yogur como un alimento muy sano ideal para complementar una dieta saludable.

    smöoy ha detectado en los últimos 2 años un aumento en la preocupación del consumidor acerca de la composición de los yogures. Especialmente destacable es el contenido en azúcares y en grasas. Mas del 45% de los consumidores habituales de yogures han estudiado sus marcas para decantarse por aquellas que cuidan estos aspectos. Por eso desde smöoy cada año se invierten más de 500.000€ en su departamento específico de I+D+i en busca de perfeccionar sus productos.

    Esta preocupación por parte de los consumidores afectó en 2017 a la caída del consumo lo que hizo que las marcas reformulasen sus productos en favor de los aportes nutricionales, reducción de grasas y azúcares. Hoy en día el yogur al que accede el consumidor es mucho más sano y saludable que el de hace unos años.

    Así, la compañía española, con sede en Murcia, smöoy, ofrece desde 2010 el primer yogur funcional del mercado. Esto significa que es bajo en grasas, rico en fibra y sin gluten.

    Según datos de smöoy con la llegada del yogur helado al mercado se ha conseguido fomentar el hábito de consumo de este lácteo a lo largo de todo el año frente al consumo estacional de helados en verano. De hecho la cuarta parte de los consumidores de yogur helado no consumen helado, sin embargo los consumidores de helados sí que consumen yogur helado.

    Otro aspecto que se señala desde smöoy es que el yogur también estimula el consumo de frutas. Son muchos los consumidores de yogur que mezclan este productos con frutas con el fin de mejorar su alimentación saludable. En concreto un 12% de las personas que comen yogur lo hacen con frutas.

    Acerca de smöoy

    Smöoy es la primera franquicia española que fabrica y vende el primer yogur helado funcional del mercado: bajo en grasa, rico en fibra, sin gluten y, ahora, fuente de calcio.

    Nació en el año 2010 pero cuenta con la experiencia de sus creadores, cuarta generación de una familia dedicada al helado tradicional desde hace un siglo. Dispone también de departamentos propios de I+D+i y de Calidad Alimentaria, en el que invierten más de 500.000€ al año en la creación de nuevos productos y en criterios de mejora.

    La compañía tiene presencia en más de 16 mercados internacionales de los cuatro continentes en países como Angola, Arabia Saudí, Argelia, China, Costa de Marfil, Francia, Guinea Conakry, Holanda, Islas Reunión, Italia, Marruecos, Panamá, Perú, Portugal, Reino Unido y Singapur.

    A lo largo de su trayectoria, smöoy ha recibido numerosos premios y reconocimientos, tanto por su producto como por su rápida expansión internacional.