«Un verano irrepetible» en «Comando al sol»

‘Comando al sol’ recorrerá esta semana tres nuevos destinos para disfrutar de ‘Un verano irrepetible’. Los reporteros recorrerán una de las rutas más impresionantes de los Picos de Europa, descubrirán las vistas más bellas del mundo, viajarán con los vecinos de Ribadeo a La Habana gallega y se zambullirán en las aguas turquesa de La Cabrera.

Picos de Europa al alcance de todos. La roca se abre entre Asturias y León para formar una de las rutas de montaña más impresionantes y al alcance de cualquiera: la ruta del Cares. Doce kilómetros de desfiladeros y paisajes impresionantes que atraviesan en verano setecientas mil personas. Cristian es uno de los guías de este sendero horadado para construir un canal que lleva agua de un lado a otro de la montaña. Caín es el principio o final del camino y el pueblo convertido en parada obligada para probar carne de León, chorizo criollo asturiano y queso de Valdeón.

Un poco más arriba, a 2.000 metros de altitud, la montaña ofrece uno de los atardeceres más bellos de los Picos de Europa. Pablo es guarda del refugio Collado Jermoso y ha de atravesar la montaña con los víveres a cuestas para abastecer la nevera del refugio. Ofrece comida, cama y un aire limpio y fresco que abre pulmones y alimenta más las ganas de alta montaña.

Las vistas más bellas del mundo. Un buen día a Rafael, vecino de la localidad coruñesa de Loiba, se le ocurrió plantar un banco frente a una zona de acantilados. Una foto y el “boca a oreja” lo han convertido en el banco más bonito del mundo. Cinco mil personas se acercan cada día en verano para posar frente a un paisaje que se ha hecho famoso.

La de los miradores naturales está siendo una revolución en Galicia. Cientos de turistas atraviesan una pasarela en zigzag frente a uno de los paisajes naturales más buscados estos días: O Fuciño do Porco (El Hocico del Cerdo). Y todo, a una hora de Ribadeo. La localidad gallega viaja en el tiempo y se convierte en La Habana cada verano para rendir homenaje a los emigrantes que viajaron a Cuba.

La isla más exclusiva. A sólo una hora de Mallorca se encuentra el último punto virgen de todo el mediterráneo occidental. La Cabrera es la isla más pequeña y desconocida de las Baleares.

Joana y su familia llevan ligados toda la vida a este pedazo de tierra, declarado Parque Nacional, propiedad del Ejército y en el que sólo está permitida la entrada de 600 personas al día. Además de ser el paraíso de la lagartija balear, es una de las mayores reservas mundiales de nacra, un descomunal molusco amenazado de muerte. Maite es una de las biólogas que trabaja sumergiéndose en las aguas azul turquesa para conocer qué parásito está acabando con este animal con forma de mejillón gigante.