Nadal y Zverev se jugarán el título de Roma

Roma, 19 may (dpa) – El español Rafael Nadal derrotó hoy al serbio Novak Djokovic por 7-6 (7-4) y 6-3 en su primer cara a cara en un año y avanzó a la final del torneo de tenis de Roma, en la que enfrentará al alemán Alexander Zverev.

El capítulo 51 de la rivalidad más extensa de la historia del tenis cayó del lado de Nadal tras una hora y 56 minutos de intensa batalla. Se esperaba con impaciencia un nuevo duelo entre ambos y no defraudó.

El español buscará mañana su octavo título en Roma ante Zverev, que derrotó 7-6 (15-13) y 7-5 al croata Marin Cilic. Si levanta la copa, recuperará además el número uno del ranking mundial.

«Fue una dura batalla, creo que un buen nivel de tenis», dijo Nadal. «Fue una combinación de táctica, una combinación de grandes tiros de los dos. Es una victoria muy importante para mí. Estoy muy feliz», añadió.

«Mañana necesito estar listo para jugar a mi mejor nivel y eso es lo que voy a intentar», avisó el mallorquín.

Nadal y Djokovic llevaban 12 meses sin verse al otro lado de la red, desde que el español se impuso en las semifinales de Madrid 2017. El serbio se perdió después la segunda mitad de la temporada por una lesión en el codo y le está costando recuperar su mejor nivel.

Hoy, sin embargo, realizó su mejor partido en mucho tiempo y por momentos recordó a aquel Djokovic capaz de todo, aquel que llegó a atormentar a Nadal incluso en arcilla.

El serbio demostró hoy que está por el buen camino y que será un rival a tener en cuenta en Roland Garros, pero para tumbar a la actual versión de Nadal hace falta algo más que un buen encuentro.

El campeón de 16 Grand Slam rompió el saque a Djokovic en tres ocasiones y cerró los dos sets con sendos winners de revés. Uno a la línea y otro menos ajustado.

Y eso que «Nole» tuvo dos pelotas para romper el saque del español en el primer juego. Nadal las salvó y logró su primer break para colocarse 4-2, pero entregó su servicio cuando sacaba con 5-3 en el marcador y tuvo que esperar al «tie break» para apuntarse la primera manga.

Djokovic arrancó con fuerza el segundo set, pero una vez que concedió el break ya no pudo recuperarse. Salvó el primer «match point» de Nadal con un saque-red, pero nada pudo hacer con el segundo.

Zverev, en tanto, derrotó en un ajustado duelo a Cilic, y llegó a su segunda final consecutiva, tras la del torneo de Madrid, hace una semana, en la que levantó el trofeo.

Cilic no fue un rival sencillo, y exigió todo de Zverev. Muy igualados, la primera manga apenas pudo definirse con un largo «tie-break» después de que ambos acumularan varios puntos de set.

El croata quizá acusó el golpe, porque perdió fuerza tras un notable comienzo en el segundo y, tras haber quebrado el servicio de Zverev, cedió el suyo dos veces, la última de ellas para perder el encuentro.

HALEP REEDITARÁ FINAL CON SVITOLINA

En el cuadro femenino, la rumana Simona Halep continuó su racha triunfal al vencer a la rusa Maria Sharapova y avanzar a la final del torneo, en la que la espera la ucraniana Elina Svitolina.

Halep, de 26 años, derrotó 4-6, 6-1 y 6-4 a Sharapova, que buscaba llegar a su primera final desde octubre de 2017, unos meses después de regresar de una sanción por doping. Sin embargo, sus buenos resultados en Roma la volverán a meter entre las 32 mejores del mundo el lunes.

«Es siempre difícil jugar contra ella y era difícil devolver las bolas, pero estaba confiada en que tenía suficiente poder para ganar el partido», expresó Halep, que en la capital italiana retuvo el número uno del mundo.

La final ante Svitolina será una reedición de la del año pasado, en la que la ucraniana se impuso con parciales de 4-6, 7-5, 6-1.

Svitolina, cuarta del mundo, superó de su lado a la estonia Anett Kontaveit con un contundente 6-4 y 6-3, y defenderá así su título en Roma, uno de los cinco que ganó el año pasado.

«Es una rival muy difícil», señaló Halep sobre la ucraniana. «Solo tengo que estar en mi mejor nivel para ganar el partido. Seré agresiva, haré mi juego y veremos qué pasa. Estaré con confianza», añadió.