El grupo municipal del PP de Aller critica una serie de «deficiencias» en las obras del último tramo del Corredor. El portavoz de la formación, Juan Antonio del Peño, aseguró ayer que se están produciendo desprendimientos de piedras e inundaciones en la zona de pastos de Espineo, en el entorno de Cabañaquinta, a causa de la obra. Del Peño explicó que Espineo «es una de las zonas de pastoreo más importantes de la capital del concejo».
Los desprendimientos de piedra se han producido porque «uno de los macizos de la zona se encuentra descompuesto por las voladuras realizadas para hacer la obra del falso túnel del Corredor». La falta de un sistema de protección, como una malla metálica, convierte el camino real hasta los pastos en «una trampa mortal para los viandantes». Las inundaciones, según añadió, son la consecuencia de un deficiente sistema de recogida de pluviales en el tramo Soto-Cabañaquinta.
El portavoz del PP aseguró que la reparación de estas «deficiencias» es responsabilidad de la Unión Temporal de Empresas (UTE) Coprosa-Dragados, encargada de la ejecución de las labores. Juan Antonio del Peño destacó que el alcalde, David Moreno (PSOE), ya está al tanto de estas reclamaciones desde hace semanas. «Lo denunciamos en la Junta de Gobierno local y en la Comisión de Obras pero, a día de hoy, no se ha hecho ninguna de las actuaciones que reclamábamos», aseguró el edil. Es por eso que el PP vuelve a exigir que se tomen medidas «antes de que estas deficiencias se agraven».