El proceso participativo del Cristo ya cuenta con varias propuestas

El proceso participativo lanzado por el Ayuntamiento de Oviedo a través de la Concejalía de Participación de Ana Taboada (Somos) en colaboración con el Gobierno regional para buscar soluciones a los usos provisionales y definitivos del recinto hospitalario del Cristo tendrá hoy una de sus últimas sesiones antes de cerrar las conclusiones. Se trata de un taller participativo abierto a la ciudadanía que se desarrollará mañana sábado en el Auditorio Príncipe Felipe a partir de las once de la mañana y que estará dirigido por los técnicos de la empresa adjudicataria del proceso, Paisaje Transversal.

Los asistentes al taller trabajarán algunos de los resultados obtenidos hasta ahora en el proceso. Se trata, en todos los casos, de resultados y conclusiones provisionales, al no haber finalizado aún el trabajo de campo. Entre ellos destacan, por ejemplo, las propuestas que las vecinas y vecinos han ido aportando para el aprovechamiento y rehabilitación de los edificios de especial relevancia. Por ejemplo, entre las propuestas aportadas por la ciudadanía destaca el traslado del actual centro de salud del Cristo al antiguo edificio de consultas externas del HUCA. Una residencia de mayores y estudiantes es otra de las propuestas, en este caso para ubicarla en el Instituto Nacional de Silicosis. También se propone la dotación de un centro de estudios e investigación integrado con usos que promuevan la actividad económica en el Centro Materno Infantil. En Policlínicas (los Hongos) quienes han participado en el proceso apuestan, por las características de este espacio, por la combinación de diferentes usos: un hotel de asociaciones, un centro cultural o un vivero de empresas vinculado a la Universidad de Oviedo.

Entre los resultados del proceso también destaca el mantenimiento de las zonas verdes actuales y su adecuación para el desarrollo de actividades deportivas y al aire libre. Asimismo, otra de las cuestiones que valoran los vecinos y vecinas consultados es la introducción de usos residenciales que aumenten la complejidad y diversidad del recinto, fomentando la actividad urbana de carácter local.

Además, el proceso participativo también tiene en cuenta el “mientras tanto”, qué hacer mientras se desarrolla el proyecto global de usos, mucho más ambicioso. En este sentido se está desarrollando una guía que permita a los agentes interesados (promotores privados) y a las administraciones públicas implicadas en el proceso desarrollar actividades que reactiven el entorno e inviertan la percepción actual de abandono. En esta guía se recogen propuestas ciudadanas individuales y también de distintos colectivos de la zona, como la formulada por SOS HUCA para el centro social multiusos. Se trata, en general, de necesidades dotacionales, iniciativas de ciudad, además de las demandas detectadas como “prioritarias”, entre ellas aparcamientos, espacios para asociaciones, huertos urbanos, pistas deportivas al aire libre, un auditorio al aire libre o una red de senderos.