Oviedo, 25 jun (EFE).- El Gobierno asturiano ha advertido hoy de que el Ministerio de Hacienda «no compartió» la subida fiscal aprobada a comienzos de legislatura con las comunidades autónomas y, por lo tanto, la rebaja de ingresos que conlleva la nueva reforma tributaria no debería afectar a estas administraciones.
«Que se haga cargo el Estado y que no se cargue más a las comunidades autónomas», ha señalado hoy el consejero de Presidencia y portavoz del Ejecutivo, Guillermo Martínez, tras calificar de «electoral» la nueva reforma fiscal y criticar su «limitada» incidencia y la incertidumbre que genera en las comunidades autónomas para mantener su suficiencia financiera.
Según Martínez, el Gobierno ha perdido la oportunidad de hacer una reforma fiscal «coherente» y que dé «solidez» a los ingresos públicos y ha optado por establecer una rebaja sobre algunos tributos concretos y sobre las rentas superiores a 175.000 euros e introducir una mayor complejidad en el modelo tributario.
Para el portavoz del Ejecutivo, si algo ha demostrado la crisis es que España tenía más un problema de ingresos que de gasto público y el Gobierno ha tomado la decisión «difícil de entender» de bajar los impuestos a las rentas más altas en un momento en el que los recursos son necesarios para atender a los ciudadanos.
Martínez ha cuestionado además que la reforma no vaya acompañada de una reforma fiscal que recoja las consecuencias de estos cambios y la posible compensación a las comunidades autónomas y ha alertado además de las consecuencias que tendrá para las cuentas públicas de estas administraciones el incremento del IVA sanitario, «que tendrá un impacto importante sobre el gasto sanitario».