Londres/Roma, 27 oct (dpa) – El Gobierno de Italia se mostró imperturbable ante la nueva noticia negativa de una de las grandes agencias de calificación de riesgo.
«Tenemos confianza en que los mercados y las instituciones internacionales sabrán comprender la eficacia de nuestras medidas», dijo el primer ministro Giuseppe Conte después de que el viernes la agencia Standard & Poor’s rebajase de estable a negativa la perspectiva de la deuda Italiana.
Aunque S&P rebajó la perspectiva no tocó la nota de la deuda, que sigue siendo «BBB», a dos escalones por encima del bono basura, informó la agencia en Londres.
Los presupuestos del Gobierno italiano generan desde hace semanas inseguridad en los mercados financieros porque Roma quiere seguir endeudándose. La Comisión Europea ha rechazado el borrador de las cuentas. La coalición de los euroescépticos Movimiento Cinco Estrellas y la Liga, que dirige el ultraderechista Matteo Salvini, no tiene intención de modificar sus planes crediticios.
«En Italia no se van a esfumar ni los bancos ni las empresas», señaló Salvini, que también es primer ministro. El otro viceprimer ministro, Luigi Di Maio, insistió: «Seguimos adelante. El cambio es inminente».
En opinión de la agencia de rating S&P’s, «los planes económicos y presupuestarios del Gobierno italiano lastran las perspectivas económicas del país. Un crecimiento débil tiene una repercusión negativa en el déficit en relación con el producto interno bruto (PIB). Una prueba de ello es el incremento de la prima de riesgo.
Esa evolución hace peligrar aún más la banca italiana, que ya atraviesa un momento complejo. Estas entidades son poseedoras de grandes cantidades de bonos soberanos.
Los presupuestos presentados por el Gobierno en Roma incumplen la normativa de la eurozona por un déficit excesivo por lo que fueron rechazados por la Comisión Europea. Standard & Poor’s cuestiona además las cifras brindadas por el Estado.
Hace una semana la agencia Moody’s, también rebajó la capacidad crediticia de la tercera economía de la eurozona. Si las grandes agencias de calificación (S&P, Moody’s, Fitch y DBRS) la rebajan al denominado bono basura, entonces el país se enfrentaría un problema considerable.