Este invierno el Convento de las Carmelitas Descalzas de Oviedo será un lugar mucho más confortable gracias a que se calienta con pellets.
IDEP acaba de sustituir sus calderas de gas propano por una caldera de biomasa para la calefacción de sus dependencias y esto convierte a las Carmelitas Descalzas en el primer convento de Asturias en utilizar una energía renovable y lo sitúa en el tercer o cuarto de España en utilizar esta tecnología.
El edificio contará a partir de ahora con una caldera de gama alta de combustión de pellets de madera, totalmente automática, conectada a internet.
Pasará de emitir unas 3 toneladas de CO² al año a no realizar ninguna emisión de CO², puesto que la biomasa es un combustible neutro en emisiones. Es, además, un combustible producido en Asturias, y con unos precios más estables que los del propano.
De esta forma el Convento pasará a gastar un 10% menos anual en calefacción del edificio, todo ello sin ningún desembolso, puesto que lo han hecho a través de una empresa de servicios energéticos.
Este Convento además, cumple 500 años de su orden religiosa, y tiene un obrador donde se producen galletas y postres tradicionales.
Ahora también, con sabor ecológico.
