El Atlético empata contra el Arsenal y el Marsella vence al Salzburgo

Londres/Marsella, 26 abr (dpa) – El Atlético de Madrid se acercó hoy a la final de la Liga Europa al obtener en la ida de las semifinales un heroico empate 1-1 en su visita al Arsenal después de jugar casi todo el partido en inferioridad numérica, mientras que el Marsella se impuso en casa 2-0 al Salzburgo.

La temprana expulsión de Sime Vrsaljko no fue rentabilizada por un Arsenal que apenas pudo marcar un gol, por mediación de Lacazette a los 61 minutos, mientras Antoine Griezmann silenció el Emirates Stadium con un gol a nueve minutos del final tras asistir a un agónico ejercicio defensivo del Atlético.

«Jugamos con diez jugadores pero trabajamos todos. Aprovechamos un error del rival para hacer el gol. Nos queda el partido de vuelta y tenemos ganas de pasar a la final», dijo el delantero francés, consciente de la importancia del empate logrado.

«Esperamos un gran ambiente en el Wanda Metropolitano para pasar a la final. Nosotros lo daremos todo para estar en la final», añadió.

El inicio del partido marcó el posterior desarrollo del mismo. En el primer minuto, Vrsaljko recibió una tarjeta amarilla por derribar a Wilshere y ocho minutos más tarde recibió la segunda amonestación por una patada a Lacazette, con lo que el Atlético se quedó muy pronto en inferioridad. Además, el árbitro francés expulsó al entrenador rojiblanco, Diego Simeone, por sus exaltadas protestas.

Para entonces, Jan Oblak ya había salvado al equipo español con una parada prodigiosa en un remate de Lacazette y el punta francés había mandado otro disparo al palo. El Atlético vivió una película de terror durante 20 minutos, en los que el Arsenal sumó ocasión tras ocasión. Se salvó por Oblak, la ineficacia del equipo inglés, el esfuerzo defensivo y alguna dosis de fortuna.

Sin embargo, el conjunto rojiblanco se recuperó de forma prodigiosa y en los últimos 15 minutos de la primera parte no sólo equilibró las sensaciones del duelo a pesar de tener un hombre menos, sino que gozó de varias ocasiones.

Así, el arquero colombiano David Ospina intervino con acierto en sendos remates de Antoine Griezmann, mientras Ángel Correa se encargaba de desestabilizar a la lenta zaga local. El Atlético se marchó al descanso con empate y buenas sensaciones, lo que no era poco después de lo sufrido en la primera media hora de choque.

El equipo inglés utilizó la paciencia para intentar derribar el muro del Atlético y se llenó de oportunidades. Pero no presentó dinamita arriba. El conjunto rojiblanco sobrevivió no se sabe cómo y le quedó un golpe por dar. Y con qué fuerza.

A los 81 minutos, el Atlético sacó la pelota de su área con un pelotazo y Griezmann lo persiguió. Lo que pasó a continuación fue una sucesión de despropósitos del conjunto inglés que concluyó con el gol del delantero francés ante la desolación local.

El Arsenal volvió a la carga y todavía tuvo tiempo Oblak de salvar otra ocasión del equipo inglés, que se marchó del partido con rostro de incomprensión ante lo que había pasado. No se lo podía creer. El Atlético se llevó un empate de oro para la vuelta y se desconocen las causas.

En el Stade Vélodrome, en tanto, el Marsella consiguió una importante victoria 2-0 ante el Salzburgo, y quedó cerca de clasificarse a la final.

«No es fácil jugar el primer partido de local. Lo sabíamos. No teníamos margen de error. No solo teníamos que jugar un partido perfecto, sino también no encajar goles. Marcar dos es aún mejor», explicó Dimitri Payet, fudamental en el triunfo marsellés.

«Vimos lo que pasó en la Liga de Campeones (…). Vimos que se dieron vuelta marcadores. Vamos a ir con la intención de ganar el partido de vuelta», expresó el volante de cara a la revancha de la semana entrante.

Florian Thauvin (15′) y Clinton Njie (63′) marcaron los goles del equipo francés, que sacó una buena renta de cara a la vuelta del próximo jueves en Salzburgo.

En un partido cerrado, el conjunto dirigido por Rudi García encontró pronto la apertura del marcador, cuando Thauvin llegó por detrás de todos y cabeceó un centro de un Payet cada día más clave para el Marsella.

Y cuando el Salzburgo buscaba la igualdad, ya en el segundo tiempo, Payet volvió a vestirse de asistente y puso el balón en los pies de Njie, que definió impecablemente y marcó un gol que puso fin al ímpetu de la visita.