(EFE).- El exjefe de Comunicación del Ayuntamiento de Avilés Julio Carretero ha defendido hoy su actuación en el caso de las supuestas irregularidades en las facturas de la inauguración del Niemeyer, según su abogado Francisco Sánchez, que se ha mostrado convencido de que su desimputación «se producirá de oficio».
El titular del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Avilés ha tomado hoy declaración en calidad de imputado a Julio Carretero.
También fue llamado a comparecer el antiguo jefe de producción del Niemeyer Marc Martí, pero no acudió por un problema procesal que ahora obliga a un nuevo requerimiento.
Francisco Sánchez ha dicho que su defendido «ha dicho todo lo que sabe sin ocultar absolutamente nada», ante el juez que incluye el caso de las facturas del Niemeyer.
El letrado ha explicado que el Ayuntamiento decidió colaborar con el Centro Niemeyer en los actos de inauguración de su Cúpula a través de dos partidas presupuestarias.
A partir de ahí, ha proseguido Sánchez, el Ayuntamiento «simplemente pagó las facturas que le fueron entregando los responsables del Niemeyer sin sospechar, obviamente, que pudiera haber alguna falsedad o alguna cosa por el estilo».
Francisco Sánchez ha dicho que se trataban de facturas «normales y corrientes», incluso de proveedores que también lo eran del Ayuntamiento en algunos casos, «y pasaron por todos los trámites municipales, como es lógico».
A preguntas de los periodistas, el abogado de Julio Carretero ha indicado que no consta que alguna de estas facturas se hubiera rehecho o modificado.
A esta toma de declaración han acudido, entre otros, los abogados de la Fundación Oscar Niemeyer, Alejandro Riera, y de Natalio Grueso (el primer director del Centro), Pelayo Mijares.
Alejandro Riera se ha referido a un informe de la Agencia Tributaria, que ha sido ampliado a instancias de la Fundación que cuantifica en cuánto se ha beneficiado Natalio Grueso, su exmujer Judit Pereiro, y José María Vigil, empleado de una agencia de viajes.
Una información que está incorporada al procedimiento y que, a partir de ahí, la Fundación Niemeyer adoptará las actuaciones procesales pertinentes a fin de evitar mayores perjuicios de los ya producidos, ha explicado Riera.
«Las cifras globales de las que se han podido beneficiar estas tres personas ronda la cantidad de los 110.000 euros», ha indicado el abogado de la Fundación.
A esa cifra, ha proseguido el letrado, habría que añadir «otras cantidades de las que indebidamente se ha hecho cargo de la Fundación Niemeyer, que está pendiente de cuantificar, pero que ya el perito insinúa una posibilidad de llegar a los 174.000 euros».
Por su parte, y a preguntas de los periodistas, Pelayo Mijares ha vuelto a defender que la intervención de Natalio Grueso en este procedimiento «es prácticamente inexistente y su actuación ha sido en todo momento legal».