Fráncfort, 11 jul (dpa) – Las expectativas de inflación de los hogares alemanes han aumentado en junio a un 7,5 por ciento interanual, según la última encuesta del Banco Central de Alemania (Bundesbank).
Este es el valor más alto desde que comenzó la encuesta en 2019. El mes previo se habían situado las expectativas en un 7,0 por ciento. Hace un año, el valor correspondiente era mucho más bajo, con algo más del tres por ciento.
La inflación media esperada para los próximos cinco años aumentó del 5,3 al 5,4 por ciento en junio.
El 84 por ciento de los encuestados espera que las tasas de inflación sigan aumentando en los próximos doce meses, mientras que solo el 5,0 por ciento espera que la inflación disminuya.
Un anclaje firme de las expectativas de inflación se considera un objetivo importante de la política monetaria, que funciona principalmente gestionando las expectativas.
Si las expectativas se desanclan, existe la amenaza de elevar las demandas salariales, lo que a su vez puede hacer que las empresas suban los precios. Los economistas hablan de una espiral de alza de precios y salarios.
Otra encuesta, realizada por la aseguradora alemana Allianz, revela que la alta inflación es la principal preocupación actual de los alemanes. El 57 por ciento de los 1.000 encuestados nombraron el aumento de los precios como el tema que más los preocupa, según los resultados del sondeo publicado hoy.
La mayoría de los encuestados afirmó que espera que el Gobierno tome medidas para frenar la inflación. Entre ellas, el 27,7 por ciento consideró útil en este sentido una bajada de impuestos, en tanto que un 18,2 por ciento apoyaría un control y tope para los precios de la electricidad y un 9,0 por ciento una ayuda a los hogares más necesitados.
El Banco Central Europeo (BCE) tiene como objetivo a mediano plazo una inflación del dos por ciento para la eurozona. Sin embargo, la inflación de junio en el área del euro fue del 8,6 por ciento (en Alemania 7,6 por ciento), un récord desde la introducción del euro.
Esto se debe principalmente a los elevados aumentos de precios de la energía y las materias primas, así como de muchos productos intermedios.
El BCE anunció subidas de los tipos de interés para frenar la inflación. Sin embargo, muchos otros bancos centrales ya han actuado y han subido sus tipos de interés clave varias veces y de forma significativa.
