Ceferino Cimadevilla rechaza que la sidra sea una droga y confía en que la Ley del Principado no le afecte «muy negativamente»

fotonoticia_20140625134117_800(EUROPA PRESS) El presidente de la comisión gestora del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida de la Sidra, Ceferino Cimadevilla, ha descartado este miércoles que la típica bebida asturiana pueda considerarse una droga. Cimadevilla ha rechazado que se pueda «meter todas las bebidas en el mismo saco» y ha confiado en que no llegue a afectar «muy negativamente» a la sidra la futura Ley de Drogas del Principado que se está tramitando.

Así lo ha indicado a los medios de comunicación tras la presentación de una nueva campaña del Consejo Regulador de la Sidra de Denominación de Origen en la Colegiata de San Juan Bautista de Gijón, a los que ha resaltado la baja graduación de alcohol de esta bebida asturiana.

Además, ha visto contradictoria que se quiera promover la sidra como Patrimonio de la Humanidad y, por otro, se la pretende incluir en la Ley de Drogas. Cimadevilla ha insistido en que no comparte que la sidra sea una droga y ha hecho hincapié en que más que en los grados de alcohol, el problema estaría en la cantidad consumida.

Unido a ello, ha destacado que actualmente en Asturias en cada campaña de sidra D.O.P. se producen dos millones de litros de 24 lagareros. En este punto, ha recordado que esta sidra se hace solo de 22 manzanas seleccionadas, a lo que ha añadido que que cada vez hay más gente que quiere producir estas variedades, a las que se podrían añadir otras tres nuevas en un futuro próximo. De hecho, ha incidido en que el Consejo Regulador ha marcado requisitos más fáciles de cumplir de forma que se pueda aumentar el número de productores.