Buscar trabajo: misión imposible

Solamente hay que saber exactamente cómo hacerlo. ¿Es tu primera vez? No te preocupes, siempre hay un comienzo para todo. ¿No es la primera vez, pero hace tiempo que no te veías en la situación? Adelante. ¿Eres reincidente pero no acabas de aprender a hacerlo bien? ¡Este post es para ti!

Elabora tu plan de acción y ¡síguelo!

Pero síguelo al dedillo, no te dejes llevar por el desánimo y la apatía. ¿Por qué te decimos esto? Porque es habitual que esas malas sensaciones te inunden antes o después cuando te encuentras inmerso en un proceso de búsqueda de empleo. ¿Te ha sucedido alguna vez?

Si es así tienes que saber que casi todo el mundo se ha visto en una situación parecida en algún momento de su vida, de hecho, hay incluso quien lo ha vivido varias veces o lo vive constantemente. Es humano sentir desolación cuando el teléfono no suena y te estás esforzando al máximo, pero la clave no es otra que perseverar hasta conseguirlo, y, sobre todo, no desfallecer.

Vamos a darte una pauta que debes seguir como si de una religión se tratase: organización. Es el secreto más importante. Cuando el caos se instala en tu vida, lo más probable es que las cosas empiecen a salir mal. Para que esto no pase, lleva un orden escrupuloso tanto de tu vida personal como de tu situación económica y, por supuesto, de tu estrategia para encontrar trabajo.

Haz un plan y síguelo sin salirte del camino. Sé lo más estricto posible en este sentido. No pienses que no pasará nada porque un día no cumplas con tus objetivos: sí pasará. Sucederá que ese día no obtendrás ninguna motivación para continuar el día siguiente.

Se trata de una carrera de fondo, un esfuerzo diario y constante. Elimina de tu cerebro la idea de que no tienes empleo: tu empleo ahora es conseguir uno. Debes dedicarle suficientes horas diarias y marcarte un horario fijo de lunes a viernes. No vamos a pedirte que ocupes también los festivos y los fines de semana: es importante que puedas descansar tal y como lo harías normalmente.

Una vez que tengas muy claro todo esto, es hora de ponerse manos a la obra. Empieza por lo más imprescindible: el currículum. Vas a necesitar uno sí o sí, tanto si tu plan consiste en enviarlo a discreción en autocandidaturas a empresas que te interesan como si lo vas a mandar a un amigo.

Por supuesto, también tienes la opción de responder a ofertas que se publican en portales especializados de internet. Seguro que ya conoces los nombres de unos cuantos. Sé cuidadoso creando el perfil, dedica a esta tarea el tiempo suficiente y no dudes en actualizarlo con frecuencia.

No se trata de algo que haces un día y nunca más tienes que revisar. Marca un día fijo a la semana para volver a entrar en la plataforma con la intención de repasar tus datos personales y profesionales, relee con frecuencia para saber qué puedes mejorar o modificar a tu favor.

No pares de hacerlo hasta que tu perfil brille y muestre lo mejor de ti, pero ¡ojo con las exageraciones! La información tiene que ser veraz, se trata de que esté lo mejor expuesta posible y de la manera más conveniente para ti, no de que te pillen la mentira en plena futura entrevista.

Volviendo al tema del currículum: debes trabajarlo al máximo. Te aconsejamos el uso de las plantillas de CV que puedes encontrar entrando en https://curriculumvitaeplantilla.net. Estas plantillas curriculum vitae pueden echarte un buen cable a la hora de estructurar todo tu contenido.

Al igual que ocurría en el caso de los perfiles de las plataformas de búsqueda de empleo, el CV nunca se deja de actualizar y repasar. Siempre hay una manera mejor de organizar toda la información, y es probable que las primeras veces que lo revises se te olviden cosas importantes que poner.

Pide a varios amigos en los que confíes en su criterio que lo lean. Anota todas las sugerencias y sé humilde: no descartes ninguna de entrada. En ocasiones es necesario que documentos de este tipo los lea alguien que no sea el propio interesado para sacar a la luz los errores o las carencias.

Una vez que tengas todo listo y presentable, ha llegado el momento de jugar tus cartas lo mejor posible. No temas al fracaso y llama a todas las puertas que puedas. Se trata de una cuestión de estadística, cuantos más intentos, más posibilidades de respuesta; recuérdalo.

¿Ya estás preparado? Pues déjate de excusas y comienza a elaborar tu estrategia hoy mismo. Es mucho mejor ir poco a poco, pero sin pausa para tratar de mantener los ánimos bien arriba. Confiamos en que lo conseguirás, solo tienes que poner de tu parte, ¡a por todas!

Antonio Godoy