El gerente de Establecimientos Residenciales para Ancianos de Asturias (ERA), Jesús Suárez, ha declarado hoy que las medidas que está adoptando este organismo autónomo consolidan el empleo público y contribuyen a garantizar las plazas de personal de cara al futuro. Para ello, se transformarán vacantes de operarios, ordenanzas y mantenimiento que se jubilan en plazas de atención directa a los usuarios (auxiliares de enfermería y ATS). El responsable del ERA ha subrayado que, de esta forma, se dispondrá de cerca de 90 plazas, entre residenciales y de centro de día, para atender a las personas que están en lista de espera.
El director general de Políticas Sociales, Enrique Rodríguez Nuño, y el gerente del ERA, Jesús Suárez, han ofrecido hoy una rueda de prensa para explicar las medidas previstas por el organismo autónomo para atender las necesidades de las personas mayores y aliviar la lista de espera. Con este planteamiento se pretende completar la ocupación de residencias abiertas y poner en funcionamiento la de Castrillón.
Ambos han recordado que la actuación propuesta no implica despidos ni pérdida de empleos, ni responde a cuestiones de ahorro o de amortización de plazas. Por ello, tanto el director general como el gerente del ERA han señalado que les resulta difícil entender cómo en un organismo con cerca de 1.500 trabajadores públicos hay algunos que pretenden generalizar un conflicto por la transformación de 7 plazas de personal, más aún cuando la medida no es novedosa puesto que es el modelo de gestión del ERA desde el año 1991 y este proceso de transformación de plazas ya se vino utilizando en mandatos anteriores.
El gerente del ERA ha destacado que los Presupuestos Generales del Estado prohíben para 2014, y por tercer año consecutivo, la contratación de nuevo personal, por lo que es necesario “arbitrar soluciones que permitan dar respuesta a esa necesidad de poner a disposición de nuestros mayores una plaza de residencia, de centro de día o de apartamento”.
A través de la transformación de las plazas vacantes se podrá contar con un volumen de trabajadores adecuado que permitirá abrir una nueva planta en el CPR El Nodo (Avilés) y completar la capacidad del CPR de Laviana, además de abrir el CPR de Castrillón, garantizando de esta manera la gestión pública de este equipamiento. Jesús Suárez subrayó que “no nos podemos resignar a tener una lista de espera de 1.400 personas y plantas de residencias sin abrir por falta de personal para prestar el servicio”.
Por su parte, el director general de Políticas Sociales ha destacado que la actuación de la consejería es una apuesta decidida por la gestión pública de los nuevos equipamientos, en consecuencia, una defensa del empleo público, presente y futuro, así como la estabilidad del ERA a largo plazo. “De no ser así no tendría ningún sentido estar invirtiendo este año unos 7 millones de euros en la finalización de los centros de Castrillón, Lastres, Cudillero y Langreo, entre otras inversiones”, ha matizado Enrique Rodríguez.