Innsbruck (Austria), 30 sep (dpa) – El español Alejandro Valverde puso hoy el broche de oro a su carrera al ganar el Mundial de ciclismo en ruta en la ciudad austríaca de Innsbruck.
Después de dos platas y cuatro bronces desde 2003, Valverde consiguió a sus 38 años el oro que tantos años llevaba buscando. La plata fue para el francés Romain Bardet y el bronce para el canadiense Michael Woods.
Valverde completó los 258 kilómetros de la prueba, con un desnivel de 4.700 metros, tras casi siete horas subido encima de la bicicleta con un gran sprint en los últimos 300 metros en los que alcanzó una punta de velocidad que no pudieron igualar sus rivales.
El ciclista del equipo Movistar era el más veloz del reducido grupo de corredores que quedaron tras la última ascensión de la jornada, una subida con rampas de hasta el 28 por ciento. Tras Bardet y Woods cruzó la meta el holandés Tom Dumoulin.
«Es increíble, son muchos años luchando y al final se ha conseguido», señaló Valverde poco después de cruzar la meta. «Estoy sin palabras porque no me lo creo. Quedar campeón del mundo era un sueño para mí. Llevaba seis medallas, ninguna de oro, y al final se ha podido conseguir.
El español ha participado ya en 12 Mundiales: en 2003 y 2005 logró sendas platas y acumuló otros cuatro bronces en 2006, 2012, 2013 y 2014.
Hoy, al fin, le llegó la medalla más preciada, la que le permitirá vestir el maillot arcoíris los próximos 12 meses. «Es una emoción increíble, terrible», comentó casi al borde de las lágrimas.
