Dortmund (Alemania), 30 ago (dpa) – El reto de Lucien Favre en el Borussia Dortmund es grande. El técnico suizo quiere crear una cultura ganadora y un estilo de juego que convierta al club en uno de los grandes del fútbol alemán y quizás pronto, de Europa. De momento, defenderá su primera posición en la Bundesliga mañana ante el Hannover.
Pero Favre lo enfatiza una y otra vez: «Lleva tiempo». Ésta es una de las frases centrales del técnico hoy en día. Sin embargo, el tiempo apremia en el negocio del fútbol, como bien sabe el ex futbolista de 60 años. En el Dortmund quieren darle tiempo, de lo contrario probablemente no lo habrían traído de vuelta a la Bundesliga desde Niza.
«No será una carrera de 100 metros, todos necesitamos un poco de paciencia», dijo Hans-Joachim Watzke, director ejecutivo del Dortmund. Y se necesitará «definitivamente» dos períodos de fichajes de verano para completar el reinicio, agregó. Esto sugiere que Favre podría tener la confianza de sus jefes incluso en caso de una crisis deportiva.
El entrenador originario de la ciudad suiza de Saint-Barthélemy, en el cantón de Vaud, es conocido como un perfeccionista meticuloso, que quiere utilizar su atención a los detalles para sacar a relucir todo el potencial de sus jugadores.
Además, en Dortmund, también debe dominar una cosa: el equilibrio entre la ambición ofensiva y una defensa que funcione. Bajo la batuta de Bosz y más tarde de Stöger, el Dortmund recibió 47 goles la temporada pasada. Esto no debería volver a suceder si quiere volver a ser el gran rival del Bayern Múnich por el título de la Liga alemana.
El director deportivo del Dortmund, Michael Zorc, ya dejó claro en el primer partido de la temporada ante el Leipzig que las ambiciones son grandes. La victoria 4-1 sobre los sajones augura un buen camino.
La temporada pasada también comenzó con buen pie bajo la dirección de Peter Bosz. En los primeros siete partidos, el Dortmund anotó 21 goles y recibió dos, con seis victorias y un empate sin goles. Estos datos les catapultaron al primer lugar de la clasificación, con cinco puntos de ventaja sobre los bávaros.
Pero la buena racha se esfumó. En la octava jornada, el Dortmund perdió ante el Leipzig poniendo fin así a una serie de 41 partidos en casa sin conocer la derrota. A partir de ahí, todo fue de mal en peor y Bosz acabó siendo sustituido por Peter Stöger a principios de diciembre. El austriaco logró clasificar al club para la Liga de Campeones en el último minuto.
Para darle la vuelta a esta tendencia, el Dortmund sacó el talonario. No sólo llegó Favre, sino que el club ha invertido más de 70 millones de euros en nuevos jugadores como Abdou Diallo, Thomas Delaney, Axel Witsel y Marius Wolf. Y el martes, el delantero español Paco Alcácer se incorporó cedido por el Barcelona.
Tras su buen comienzo de temporada, el Dortmund buscará dar un nuevo paso mañana en campo de Hannover, un escenario en el que perdió 4-2 hace diez meses.
En otro de los partidos destacados de la segunda fecha de la Liga alemana, el Stuttgart recibe el sábado al Bayern Múnich tocado después de haber perdido el primer partido ante el Mainz y haber caído eliminado en la primera ronda de la Copa alemana ante el club regional Hansa Rostock.
«Como vimos la última vez que jugamos en Múnich, siempre tienes una oportunidad, ¡y queremos aprovecharla!», dijo el centrocampista Erik Thommy recordando la sorprendente victoria 4-1 ante el Bayern el pasado mes de mayo.
Por su parte, los bávaros llegan conscientes de que necesitaron un polémico penal para romper el empate 1-1 ante el Hoffenheim en el inicio de la Bundesliga, en un encuentro que acabó 3-1, y con la baja importante de Kingsley Coman por una lesión en el tobillo.
Su hueco lo llenará seguramente el veterano Arjen Robben, de 34 años. «Estoy en forma y listo para jugar un papel importante. La edad no es un factor. Sólo hay buenos o malos, no jóvenes o viejos», insistió el holandés.
En los otros partidos del sábado, el Hoffenheim recibe al Freiburg, el Bayer Leverkusen al Wolfsburgo, el Eintracht Frankfurt al Werder Bremen, el Nürnberg al Mainz y el Augsburgo al Borussia Mönchengladbach. El domingo, el Leipzig se mide al Fortuna Düsseldorf y el Schalke al Hertha de Berlín.
Por Dietmar Fuchs (dpa)
