Madrid, 22 ago (dpa) – El joven futbolista noruego Martin Odegaard encara una nueva cesión cuatro años después de firmar por el Real Madrid. Entonces era un joven prodigio y hoy es un trotamundos de incierto destino y en peligro de sumir su carrera en la mediocridad.
El club blanco anunció otra cesión, al Vitesse Arnhem, después de encontrarse sin sitio en el equipo español. Como antes sucediera con Carlo Ancelotti, Rafa Benítez y Zinedine Zidane, con el nuevo entrenador, Julen Lopetegui, tampoco encontró acomodo en el primer plantel. Repite en Holanda, considerada por FIFA como la decimocuarta Liga del mundo.
La singular historia de Odegaard con el conjunto blanco comenzó en 2014. Entonces, y después de vencer en un sorprendente cásting, el Real Madrid consiguió contratar a un jugador que apenas tenía 15 años.
Lo cierto es que la familia del muchacho «paseó» a la perla por media Europa visitando a algunos de los mejores clubes del continente. Estuvo en las ciudades deportivas del Milan, Chelsea, Bayern Múnich y Barcelona antes de que se decidiese por el Real Madrid.
Fue una auténtica subasta digna de un programa de televisión y tanto es así que muchos medios lo calificaron como «un fichaje mediático». El Real Madrid desplegó toda su artillería -paseo por la sala de trofeos, fotos con Zidane, abrazos con Cristiano Ronaldo- para conseguir la preciada firma.
El acuerdo con el club blanco también incluyó un puesto para el padre del adolescente, Hans Erik Odegaard. Concretamente como entrenador de un equipo de juveniles.
Por entonces, el pequeño Martin era un chico que sobresalía por su técnica, capacidad de pase, desborde y gol desde la media punta, su posición favorito. Sólo faltaba por ver si todo lo que apuntaba se consolidaría.
«Es un jugador de un talento extraordinario en el que tenemos muchas esperanzas», dijo en su presentación Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales del Real Madrid.
El joven futbolista noruego seguía quemando etapas a la velocidad de la luz y el 13 de octubre de 2014 se convirtió ante Bulgaria en el jugador más joven de la historia en disputar la clasificación para la Eurocopa de selecciones con apenas 15 años y 300 días.
Al año siguiente, se convirtió en el futbolista más joven en participar de la Liga española. Lo hizo con 16 años y 157 días en un duelo del Real Madrid ante el Getafe el 23 de mayo de 2015.
Pero hubo un momento en el que su progresión se estancó. Llegaron las cesiones y con ellas cierta sensación de desarraigo. En plena edad de formación deportiva y personal, Martin se encontraba con diferentes compañeros cada año, la necesidad de hacer nuevos amigos, búsqueda de afecto en ciudades diferentes y casi con la obligación de mejorar su fútbol para recuperar la confianza de los inversores.
El Real Madrid lleva gastados ya 12,5 millones de euros en un jugador que de momento no le fue útil. Es el precio de fichar a un futbolista muy joven y sin que haya sido probado para la competición de máximo nivel, lo cual es una clara tendencia en el fútbol europeo por parte de muchos clubes. Así se pretende competir con el dinero de los jeques o el fútbol inglés con su imbatible contrato televisivo.
Lo que es innegable es que a día de hoy la gran perla de 19 años, la edad que ahora tiene Odegaard, se llama Kylian Mbappé. Y un año menos tiene el brasileño Vinicius, quien sí encontró sitio en el primer equipo del Real Madrid. Así es el fútbol.
Por Alberto Bravo (dpa)
