La consejera de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Belén Fernández, ha anunciado este sábado que el lunes se pondrá en contacto con el ministerio de Medio Ambiente para pedirle una reunión urgente con el Principado y el Ayuntamiento de Gijón para abordar las consecuencias del nuevo auto de la Audiencia Nacional que impide abrir la depuradora de Gijón Este.
El objetivo de Fernández es analizar en profundidad el auto judicial y adoptar «cuanto antes» las medidas necesarias para que la estación de tratamiento de aguas residuales entre en servicio. En nota de prensa, la consejera argumenta que hará esa demanda urgente porque no ha recibido información de la Administración del Estado sobre dicha decisión judicial.
La titular de Infraestructuras recuerda que aún está a la espera de recibir la respuesta ministerial a la consulta, ya formulada en las primeras reuniones sobre la situación de la depuradora, acerca de la posibilidad de implantar una solución provisional para recuperar el nivel de pretratamiento de las residuales que existía antes de la ejecución de la EDAR.
En cuanto a la solución definitiva, la consejera reclamará al Gobierno del Estado un cronograma para culminar la tramitación del estudio de impacto ambiental.
Para la consejera, es «social y ambientalmente urgente solventar la depuración de la mayor ciudad de Asturias».
