El aire acondicionado es una invención relativamente reciente que facilita la vida a miles de personas de todo el mundo cuando las temperaturas tocan límites desagradables. Sin embargo, a la hora de adquirir un aire acondicionado, hay mucho que aprender antes de tomar una decisión adecuada e informada, pues éste es un electrodoméstico que cuenta con una instalación muy específica y que ha de durar mucho tiempo funcionando.
Cuando fue creado en los años veinte, el aire acondicionado recibía el nombre de enfriadora centrífuga, y era una máquina de aspecto y funcionamiento notablemente diferente que a día de hoy.
El concepto actual es el mismo, una máquina que mediante una turbina hace pasar el aire de una estancia cerrada a través de una resistencia y lo expulsa más frío, de vuelta a dicha estancia.
Pero en el presente, los aires acondicionados son más pequeños, menos ruidosos y llevan a cabo más tareas que solo enfriar, contando con la capacidad de regular la temperatura de forma exacta mediante un termostato y calentar el aire, además de enfriarlo.
A continuación se profundizará en los diferentes tipos de aires acondicionados, sus características principales y se hablará de las empresas más importantes del sector.
Aires acondicionados de pared
Éstos son los aires acondicionados más comunes a nivel doméstico por su reducido precio en comparación al resto. Las principales marcas de aire acondicionado de pared son Fujitsu y Daikin, pues representan la mejor relación calidad-precio del sector de aires acondicionados de pared.
La principal ventaja de los aires acondicionados de pared con respecto a los de techo es que la instalación es notablemente más sencilla, pues basta con que se instalen en una esquina superior del salón que dé al exterior, para conectar el compresor con el split por medio de unos tubos. La obra que requiere la instalación es relativamente limpia, rápida y apenas estresante, pues no requiere de la reestructuración del salón. Por si fuera poco, éstos son los modelos más silenciosos.
Sin embargo, estos aires acondicionados tienen un par de desventajas. Para empezar, no son tan potentes como los de techo, dado que la entrada del aire toma lugar desde un ángulo bastante menos productivo, y por lo cual, se tarda más en que éste se disperse a lo ancho y largo de toda la estancia.
Otro problema es el espacio que ocupan, pues aunque estén situados en lo alto del techo pueden comprometer la distribución de los muebles más altos en el caso de que coincidan en la misma pared.
También llaman más la atención desde un punto de vista estético, y camuflarlos, puede suponer un aumento en el precio.
Aires acondicionados de techo
Estos aires acondicionados son más caros y más complicados de instalar, pero por lo general, hasta el aire acondicionado de techo más básico supera con creces a cualquier otro aire acondicionado de pared, en lo referente a potencia y productividad, pues la entrada del aire es mucho mejor.
Esta eficiencia energética puede suponer un cuantioso ahorro económico, dependiendo del hogar y del uso que se le piense dar al aire acondicionado en cuestión. En lo referente al aspecto estético, los aires acondicionados de techo son notablemente más sutiles y no ocupan prácticamente nada de espacio, fundiéndose perfectamente con cada estancia.
Sin embargo, debido al mayor recorrido que ha de hacer el aire, pueden llegar a ser más ruidosos que los de pared, aunque realmente la mayoría de modelos de las marcas más importantes, como LG y Mitsubishi Electric, son bastante silenciosos en ambos casos, por lo que esta característica es difícilmente notable.
La importancia de elegir una buena marca
Al igual que el motor de un coche, el compresor de un aire acondicionado está fabricado por una marca en concreto y es por ello que sus piezas no están estandarizadas. Elegir una buena marca de aire condicionado como LG, Fujitsu o alguna de las otras previamente mencionadas no es solo una elección de calidad, sino un movimiento estratégico.
Cuanto más popular sea la marca, más cantidad de piezas se fabrican y más baratas son las eventuales reparaciones. Es por esto que hay que elegir con cuidado e informarse apropiadamente antes de comprar un aire acondicionado.