En los últimos años las masacres en Estados Unidos se han incrementado a unos niveles realmente alarmantes. Sin embargo, a pesar de los innumerables tiroteos que han cobrado la vida de miles de ciudadanos inocentes de ese país, el porte de armas sigue siendo legal.
Es importante precisar que el porte legal de armas consiste en el derecho a la tenencia, uso y transporte de armas, con fines defensivos, deportivos, cinegéticos, escolta privada o de otra naturaleza, sin perjuicio de otras actividades legales que pudieran realizarse con las mismas.
Este derecho suele estar asociado con Estados Unidos porque es el único país donde está plenamente reconocido portar armas con pocas limitaciones por parte de la ley. Además, también es el país donde hay más armas en manos de particulares que en cualquier otro país del mundo.
En pocas palabras, comprar un arma en Estados Unidos es casi tan fácil como ir al supermercado a comprar comida. Y, por supuesto, esto se ha convertido en un verdadero problema de seguridad.
Pero la pregunta es: ¿por qué no se hace nada al respecto? ¿por qué siguen permitiendo la legalidad del porte de armas?
La respuesta es más sencilla de lo que parece. Se trata simplemente de un asunto económico, ya que, el sector de las armas aporta muchísimo dinero a Estados Unidos. Es decir, es un mercado realmente sólido. Por otra parte, el porte de armas está avalado en la Constitución de Estados Unidos desde hace cientos de años y forma parte de la cultura y de la idiosincrasia de los americanos. Adicionalmente la Sociedad Americana de Armas es la sociedad que tiene más miembros a nivel mundial. Por lo tanto, el porte de armas tiene un peso cultural y económico demasiado fuerte que es difícil o casi imposible de desarraigar de la cultura americana.
Por otro lado, de acuerdo con una encuesta reciente, el 41% de los americanos vive en hogares donde hay al menos un individuo armado y el 72% dice haber disparado alguna vez. Por lo que, para los ciudadanos americanos poseer armas está considerado un derecho inalienable.
Según la encuesta, cuando se le pregunta a la gente por las razones para comprar una pistola o un rifle, el 67% responde que lo hace por protección. Un 38% dice que es para cazar, un 30% para practicar tiro de forma recreativa, un 13% como elemento de colección y un 8% por trabajo. Lo que puede resultar alarmante es que el 57% de los consultados reconoce salir armado a la calle: 11% admite que lo hace siempre, un 15% casi siempre y un 31% algunas veces.
Estas cifras nos ayudan a entender por qué está tan difundida la violencia armada en el país.
Lo peor de todo, es que el porte de armas de lo que más lejos está es de eliminarse. De hecho, a pesar de las continuas masacres, la mayoría de los americanos reconoce que portar armas por “protección” es parte de su cultura y no está de acuerdo con la abolición de esta ley.
Esto, lo único que nos lleva a concluir es que las masacres en Estados Unidos no tendrán ninguna disminución, sino que, muy por el contrario, aumentarán con el paso de los años. No hay soluciones fáciles ni rápidas a esta situación, ya que, la solución ideal sería simplemente abolir el derecho al porte de armas. Pero como eso no va a suceder, lo único que queda es concienciar a la población constantemente sobre los riesgos del porte de armas y sobre el uso desmedido que existe en Estados Unidos sobre ellas.
Pero, de momento, las masacres seguirán estando a la orden del día y seguirán llevándose por el medio la vida de personas inocentes.