Barcelona, 6 oct (dpa) – El Alavés agravó hoy la crisis del todopoderoso Real Madrid al imponerse por 1-0 al ahora atribulado campeón de Europa con un gol de Manu García en el tiempo añadido de su improductivo duelo por la octava fecha de la Liga española.
El tanto sobre la hora del centrocampista español cerró una semana negra para los blancos que, tras caer el martes en la Champions ante el CSKA de Moscú, enlazaron su tercer tropiezo consecutivo en el campeonato doméstico.
La derrota, la segunda ya en lo que va de torneo, comprometió a un Julen Lopetegui que ya afrontó el choque en el punto de mira y observado como si se tratara de una final.
«Todos sabemos cómo es la vida de un entrenador. Para mí, el reflejo del equipo que vamos a volver a ver es el que hemos tenido al principio de temporada», señaló tras el nuevo revés el preparador del Real Madrid.
«Un entrenador no piensa en eso y aparentemente de una dinámica tan negativa que estés a tres puntos del liderato es lo más positivo», prefirió rescatar un contrariado Lopetegui, mientras algunas voces especulaban ya con una posible destitución.
En evidentes problemas, el ex seleccionador español prefirió obviar las seis largas horas y 45 minutos que su equipo acumula ya sin marcar. Y, sin rehuir su responsabilidad, atribuir a las bajas, a la mala suerte y a la perniciosa dinámica los malos resultados de un Real Madrid que, en su opinión, mereció más.
«Lógicamente estamos decepcionados porque queríamos ganar. Hemos arrancado bastante bien, con opciones de gol y entrando fuerte; el hecho de no marcar nos ha castigado habiendo hecho méritos para sacar mejor resultado. Eso nos ha pasado factura. La derrota es un castigo excesivo», afirmó el entrenador blanco.
Lo cierto es que el Real Madrid lo intentó. Pero generó tan poco que, 88 años después de su última victoria sobre los blancos, el Alavés aprovechó la última oportunidad que tuvo para sumar un triunfo que lo elevó al cielo.
Y es que, con sus tres puntos de hoy y a la espera de lo que mañana haga el Barcelona ante el Valencia en el duelo estrella de la jornada, el modesto equipo vasco dirigido por Abelardo Fernández igualó a blancos y azulgrana en la cima de la clasificación.
Más allá de las bajas y de los contratiempos que hoy tuvo con las molestias de Karim Benzema y Gareth Bale, el campeón de Europa evidenció, de nuevo, que ganar es más difícil sin Cristiano Ronaldo.
Ni el francés ni el galés ni el español Mariano -en el segundo parcial- lograron hoy emular al goleador portugués.
Los blancos, que en los primeros 45 minutos fueron de más a menos, cerraron el primer asalto con buenas y malas noticias. Las malas incidieron en su dificultad para generar ocasiones y para anotar. Hasta el punto de que, por primera vez en años, el Madrid superó ya entonces las seis horas sin marcar.
Dani Ceballos, novedad en el once de Lopetegui, fue quien más se acercó al gol en el primer parcial. Apenas se habían disputado cinco minutos cuando el mediocampista español probó a Fernando Pacheco y éste, bajo arco vasco, se lució.
Thibaut Courtois, en cambio, no realizó ninguna intervención. Fue toda una novedad, la buena, para un Real Madrid que, hasta hoy y como visitante, siempre se había visto obligado a remontar.
El Alavés, que buscó sorprender a la contra, no probó al arquero belga hasta el segundo parcial. Para entonces, la lluvia caía con intensidad sobre Mendizorroza y los blancos se habían hecho notar.
Mariano, sustituto del tocado Benzema tras la pausa, generó más peligro que el delantero francés. Pero el Alavés se resguardó tan bien que ni los cambios ni los intentos tuvieron efecto.
Al contrario, Jony, el mejor hombre del Alavés durante todo el partido, fue quien avisó en el 76′. Su mano a mano con Courtois, tras un fulgurante contrataque, se marchó por poco.
Aunque cada vez más desesperado, el Real Madrid no desistió. Y hasta Bale se arriesgó a lanzar una falta justo antes de ceder su puesto al brasileño Vinícius con aparentes problemas musculares.
El gol, sin embargo, se cantó en el otro arco, cuando, en los últimos segundos del tiempo añadido, Manu García aprovechó un despeje del arquero blanco para ejecutar al campeón de Europa.
«A veces las cosas salen y otras no. También es importante que tengamos a todos los jugadores. El gol llegará y volveremos a ganar», auguró Lopetegui en un intento de levantar el ánimo de los suyos.
«Es un momento duro y está claro que el entrenador es el primer responsable», asumió después.
Se viene la pausa de la Liga a causa de la selecciones y, si Florentino Pérez aguanta la presión de los críticos, al cuestionado entrenador blanco le vendrá más que bien.
En los otros partidos de la jornada del sábado, el Eibar sorprendió al Girona al imponerse por 3-2 en la cancha de los catalanes. El Levante, por su parte, superó por 1-0 como visitante al Getafe con un gol del macedonio Enis Bardhi.
En el último choque del día, de urgencias para ambos equipos, el Leganés repitió resultado frente al Rayo Vallecano gracias a un tanto del argentino Guido Carrillo. Los madrileños se quedaron así con el duelo regional y superaron a sus vecinos en la clasificación.
Por Noelia Román (dpa)