Un imán que conoció a Chérif Kourachi intentó disuadirle de viajar a Irak

9497167wLondres, 10 ene (EFE).- Un imán del suburbio parisino de Aubervilliers, Mehdi Bouzid, dijo hoy a la BBC que intentó disuadir a Chérif Kourachi de viajar a Irak y opinó que sus actos terroristas pudieron estar motivados por el deseo de «venganza» y un sentimiento de «marginación» en Francia.

En declaraciones al programa «Today» de BBC4, Bouzid explicó que conoció al menor de los hermanos Kourachi, los autores del atentado en la revista francesa «Charlie Hebdo», y aseguró que nunca hubiera podido «sospechar» que fuera capaz de ello.

«Chérif era un buen chico, pero le perdí hace dos o tres años», relató el imán.

«Solíamos jugar al fútbol y yo hablé con él la primera vez que quiso ir a Irak para decirle que no era la solución, que no sabes para quién estás luchando», declaró.

Chérif Kourachi, de 32 años, pasó 18 meses en prisión por intentar viajar hace una década a Irak para unirse a la yihad.

«Es muy fácil en este distrito decirles a los jóvenes: ‘Irás al cielo, harás cosas maravillosas’, y creo que Chérif cayó en esa trampa», reflexionó el imán.

«Hace dos semanas estaba con mi padre, rezando en el distrito 19 de París, y siempre tenía una sonrisa en la boca», prosigue en la entrevista con la cadena pública británica.

«Nunca sospeché que pudiera hacer esto. Cuando vimos las imágenes, reconocí su manera de andar en el vídeo, y su voz», añade.

Bouzid opinó que Kouachi pudo estar motivado por un deseo de «venganza» por el sufrimiento en los países musulmanes, que atribuía a los actos de las potencias occidentales, y por un sentimiento de desarraigo y «marginación» en Francia.

«No justifico ningún atentado, pero cuando miras a su pasado (de los hermanos), cuando no tienes identidad, cuando no perteneces, puedes tomar medidas muy feas», afirmó el imán.

«Cuando tú sabes que algo me hiere, tienes que respetarme, y ‘Charlie Hebdo’ no lo hacía», continuó.

Según el imán, «cuando tienes un nombre musulmán, es muy difícil encontrar un trabajo, practicar tu religión, llevar tu velo» en Francia.

«Ayer fui a París y sentí sobre mí ojos llenos de miedo, rabia y odio. Pude sentirlo», explica.

«Es un gran reto para Francia. Deben empezar a pensar en ello, porque estamos aquí, yo nací aquí, tengo mi familia aquí, sueño en francés, soy francés», manifestó, en alusión a la discriminación que sufren los árabes y musulmanes.

El imán dijo temer que los atentados de los últimos días, en los que han muerto 17 personas más los tres autores, provoquen represalias contra la población musulmana francesa.

El pasado 7 de enero, los hermanos Said y Chérif Kouachi, presuntos yihadistas, asaltaron a tiros la sede del semanario satírico francés «Charlie Hebdo», en pleno centro de París, y mataron a doce personas.

Los hermanos, huérfanos desde la infancia y fichados por las autoridades, fueron abatidos ayer en Dammartin-en-Goele, al noreste de París, después de atrincherarse en una imprenta y ser acorralados por la Policía.

Según los servicios de inteligencia franceses y estadounidenses, al menos uno de los dos, Said Kouachi, de 34 años, recibió entrenamiento durante los meses que pasó en 2011 en Yemen con Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA).

Otro presunto yihadista, Amedy Coulibaly, supuestamente vinculado a los hermanos, murió ayer en una operación policial tras haber tomado varios rehenes en un supermercado judío de París, cuatro de los cuales también resultaron muertos

Coulibaly era además sospechoso de haber asesinado el jueves a una policía municipal en el sur de la capital francesa.