(dpa) – Moverse regularmente es muy importante cuando se sufre de diabetes de tipo dos y eso lo saben la mayoría de las personas. ¿Pero cómo se hace para mantenerse realmente en forma?
Lo más importante es pensar bien acerca de en qué momento se puede integrar bien el movimiento en el día a día, recomiendan los expertos en salud.
Un truco bien simple, por ejemplo, es acostumbrarse a dar un paseíto de unos diez minutos por el barrio todas las noches después de cenar. O hacer una parte del camino de regreso a casa a pie. Para hacer compras que no impliquen cargar con muchas bolsas, se puede ir al supermercado en bicicleta.
Mantener el compromiso
Si se necesita un poco de ayuda extra para la motivación, se puede usar un contador de pasos. Esto permite visualizar rápidamente los progresos, y eso a su vez alienta a hacer más deporte. Lo ideal es dar unos 10.000 pasos al día.
Quien logró entrar en ritmo y tiene ganas de moverse más, debería encontrar un deporte con el que se sienta a gusto. Amigos, grupos de deporte o entrenamientos con fecha y horario fijo pueden ayudar a mantener una rutina.
Para los diabéticos de tipo dos son especialmente buenas actividades como caminar a paso firme, el senderismo, correr, andar en bicileta o nadar.
De todas formas, los diabéticos de tipo dos deberían hablar siempre con el médico acerca de con cuánta intensidad pueden entrenar. En caso de duda, como problemas cardíacos, se pueden hacer pruebas de resistencia con el cardiólogo para estar seguro de que no se corre ningún riesgo.
