Londres, 5 dic (EFE).- Londres «aplaudió» hoy que la ONU haya aprobado una intervención militar africana y francesa para proteger a la población civil de la República Centroafricana, ante el «deterioro» de la situación de seguridad en ese país.
El secretario de Estado británico para África, Mark Simmonds, destacó en su cuenta oficial de Twitter «la necesidad de frenar la violencia y los abusos de los derechos humanos cometidos en la República Centroafricana».
El Reino Unido «aplaude la resolución de la ONU para proporcionar apoyo internacional a una respuesta, liderada por África, a la inestabilidad en la República Centroafricana», dijo.
El Consejo de Seguridad de la ONU, del que forma parte el Reino Unido, aprobó hoy por unanimidad una resolución que autoriza el envío de una fuerza africana (MISCA), apoyada por tropas francesas, para proteger a la población y ayudar a restaurar la seguridad en ese país, afectado por enfrentamientos civiles en los últimos meses.
Inicialmente se prevé el envío de una fuerza africana de unos 4.000 soldados, apoyados por unos mil militares franceses, y se establece la posibilidad de que la MISCA pueda convertirse en el futuro en una operación de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas.
En un comunicado, un portavoz del Ministerio británico de Exteriores observó hoy que la decisión del Consejo de Seguridad «reconoce la gravedad de la situación en la República Centroafricana».
«El Reino Unido comparte totalmente las preocupaciones de la comunidad internacional sobre las condiciones terribles de deterioro en la República Centroafricana», agregó el portavoz, para el que «es vital restaurar la seguridad básica y garantizar una asistencia humanitaria que pueda ayudar a quien lo necesita».
Según el Foreign Office, también «es vital el progreso político hacia la implementación de un Gobierno constitucional» en la República Centroafricana.
La decisión del Consejo de Seguridad llega después de que el presidente de la República Centroafricana, Michel Djotodia, pidiera hoy a su homólogo francés, François Hollande, una intervención «urgente» para intentar devolver la calma a la capital de su país
