¿Qué es el pulido de suelos de mármol y qué beneficios tiene?

El mármol es una de las piedras que más demanda ha tenido a la hora de revestir pisos y fachadas por las connotaciones de lujo que evoca.

Formado a partir de rocas calizas que alcanzan el grado de cristalización por las presiones y altas temperaturas, su uso ha sido llevado desde la arquitectura hasta el arte, formando algunos de los conjuntos y esculturas más famosos de la historia de la humanidad. Basta mencionar cualquiera de las esculturas del arte clásico o incluso el Taj Majal para demostrar que es una de las materias primas que más aceptación y duración ha tenido con el pasar de los siglos.

De ahí que, aún hoy, sean muchos quienes apuestan por montar pisos de este material en los edificios de oficinas, pero también en tiendas y en viviendas como un ejemplo de elegancia, tendencia y clase.

Sin embargo, para poder conseguir que luzca brillante y como nuevo, es necesario tener en cuenta que, en su mantenimiento, será necesario el pulido de pisos con máquinas especializadas que serán capaces de, en poco tiempo y con cierta facilidad, hacer que luzca casi como nuevo.

Al ser poroso, hay que tener en cuenta que es fácil que pueda estropearse si no se tiene en cuenta que cualquier ácido, agua con un ph disparado o incluso el calor. Es por ello que, quien decide apostar por este material noble, desde el primer momento apuesta por un mantenimiento integral que le permita alargar su perfecta imagen.

¿En qué consiste el pulido de pisos de mármol?

El mármol realmente no necesita grandes productos para conseguir su limpieza, pero sí una rutina que permita que esté constantemente mantenido,de ahí la importancia de elegir una empresa o profesional que encargue del pulido de pisos de mármol.

Para empezar, para limpiar el mármol y que mantenga su brillo y la intensidad de su color es necesario saber que no se deben usar productos que contengan químicos ya que, como se ha dicho, al ser poroso, podría verse comprometido y perjudicado.

Lo ideal es el jabón con un ph neutro que sea capaz de limpiar las impurezas y manchas pero que permita que mantenga su originalidad e incluso, en algunos casos, incluir en la rutina de pulido un sellador para evitar su desgaste y más cuando está en el piso y recibe, a diario, pisadas de suelas llegadas de la calle.

Lo recomendable es comprar o alquilar una máquina pulidora que, mediante discos de fibra, consigue lavar, pulir y abrillantar este material haciendo que los pisos luzcan como recién puestos.

Su fácil manejo y el ahorro de tiempo que proporcionan hacen que sean la opción elegida para superficies de oficinas y edificios, pero quizá, para las viviendas, lo ideal sería tener una rutina constante de limpieza que, cada día, permita cuidar el mármol.

El peligro está en el cloro, de ahí la necesidad de apostar por agua con un ph correcto, o incluso de pasarse al agua destilada, el bicarbonato rebajado o incluso el vinagre blanco diluido en caso de no conseguir el jabón neutro para la limpieza diaria.