El secretario general y portavoz de FORO, Adrián Pumares, ha preguntado esta mañana al presidente del Principado, Adrián Barbón, “si puede informar del contenido de las conversaciones que ha mantenido Pedro Sánchez con Lakshmi Mittal, especialmente tras conocer el reciente cierre del horno alto B de Gijón”. Según Pumares, “este cierre acarrea consecuencias muy graves sobre el empleo y el futuro de la industria asturiana”.
El dirigente forista recordó al Presidente del Principado que “dado que hizo referencia en un acto electoral con militantes socialistas en Gijón a la reunión de Sánchez con Mittal, no existe ningún motivo por el que el conjunto de la sociedad asturiana no pueda conocer el contenido de estas conversaciones, especialmente tras el cierre del horno alto B de Gijón”.
Pumares hizo referencia a “la reunión que ya mantuvieron Sánchez y Mittal en el mes de enero en Davos, y en la que el Pedro Sánchez se comprometió a avanzar en la solución a tres problemas fundamentales de nuestra industria: el elevado precio de la energía en nuestro país, el incremento de los costes indirectos del CO2 y la implantación de un arancel ambiental”. El portavoz forista señaló que “todas estas promesas no se tradujeron, como es costumbre, en hechos”.
El portavoz de FORO también consideró una buena noticia “la vuelta de Isidro Martínez Oblanca al Congreso de los Diputados, puesto que esto será una garantía de que habrá una voz que alce la voz en la Cámara Baja en defensa de los intereses de Asturias”. Pumares recordó que “precisamente gracias a Isidro Martínez Oblanca y a las enmiendas presentadas por FORO a los Presupuestos Generales del Estado actualmente en vigor es por lo que estos incluyen importantes partidas para la industria electrointensiva”.
Finalmente, Pumares recordó al Presidente del Principado que “como ya le dije en esta misma cámara, un mal gobierno no es la solución a nada. Y desde luego, un gobierno liderado por Pedro Sánchez, que tiene a Teresa Ribera como alumna aventajada y en el que entra Unidas Podemos es un mal gobierno que pone en serio riesgo el futuro de la industria asturiana”.