Varios centenares de padres chinos cuyo único hijo ha fallecido se han manifestado este lunes en la capital del país, Pekín, para protestar por las políticas de natalidad del gigante asiático, según ha informado el diario estadounidense ‘The Wall Street Journal’.
Portando gorros blancos en los que se podía leer ‘Padres del hijo único perdido’, cientos de personas se han manifestado frente a la oficina de planificación familiar en la capital, asegurando que su situación es precaria al no contar con fuentes de ingresos.
Algunos de los participantes han portado fotografías de sus hijos fallecidos y pancartas en las que denunciaban ser «víctimas» de las políticas de planificación familiar en el país.
Jie Dongsheng y su esposa, Li Xurong, han relatado que perdieron a su hijo a los 26 años de edad a causa de la leucemia, agregando que no pueden trabajar debido a su mal estado de salud. «Era nuestra vida. Ahora no tenemos nada», ha dicho Jie.
La Comisión Nacional de Sanidad y Planificación Familiar anunció durante el fin de semana que el subsidio mensual a las familias cuyo hijo único ha muerto o se encuentra discapacitado se incrementará de los 270 yuanes (unos 36,8 euros) hasta los 340 yuanes (cerca de 46,4 euros).
El Gobierno chino anunció en octubre de 2015 que permitirá que todas las parejas puedan tener dos hijos, en una medida que pone fin a la estricta política del hijo único en vigor desde hace décadas y que ya había sido revisada parcialmente a finales de 2013 en función de los hermanos que tuviesen los progenitores.
La primera regulación sobre planificación familiar se introdujo a finales de la década de los 70 para detener el crecimiento poblacional. Así, se prohibió a las parejas de zonas urbanas tener un hijo y se fijó un límite de dos para las parejas de áreas rurales, siempre y cuando del primer embarazo naciera una niña.
Como consecuencia de ello, las autoridades chinas lograron impedir unos 400 millones de nacimientos, provocando una fuerte caída de las tasas de natalidad con un descenso anual de 3,45 millones que podría alcanzar los ocho millones anuales después de 2023.