San Sebastián, 16 ene (EFE).- El entrenador del Gipuzkoa Basket, Jaume Ponsarnau, ha mostrado hoy su optimismo por poder conseguir un triunfo ante el CAI Zaragoza este domingo, a pesar de las bajas que tiene el equipo y la duda del americano Taquan Dean, uno de sus mejores hombres.
El preparador catalán ha desvelado en su comparecencia de hoy que Mikel Motos y Jordi Grimau todavía no están en condiciones de jugar y que Dean ha sufrido un proceso gripal en la semana que le convierte en «seria duda».
Ponsarnau, a pesar de los continuos reveses que recibe semana sí, semana también con los problemas físicos, ha declarado que el GBC busca «la séptima victoria» y ha explicado que su optimismo viene motivado «por la gran confianza y el trabajo defensivo» que desarrolla su plantilla en las últimas jornadas.
Sabe que CAI llega a este encuentro» con un nivel de tensión y también de estrés más alto» porque se juega su entrada en la Copa del Rey, algo que no le preocupa siempre y cuando sus jugadores ofrezcan la versión que Ponsarnau cree que pueden alcanzar.
Ha hablado largo y tendido del conjunto zaragozano, equipo que «muestra calidad», producto de las nuevas incorporaciones y del trabajo de su nuevo entrenador, aunque ha resaltado que los maños estén «en un proceso de construcción e igual en ocasiones no es tan consistente como antes».
Ha asegurado que su rival «está muy bien trabajado» y que aprovecha cualquier ventaja para «pasar bien el balón» y hacer canastas fáciles.
Ha destacado sobre todas sus virtudes «la potencia en la posición de cuatro» tanto de Marcus Landric como de Stevan Jelovac, que tiene «mucho punto fácil» y generan gran parte del juego ofensivo del equipo aragonés.
