La Confederación Española de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA) ha denunciado amenazas y presiones ejercidas sobre las familias que se han opuesto a que sus hijos se sometieran a la evaluación final de Primaria de la LOMCE.
Esta organización, que animó a los padres a que no llevaran a clase a sus hijos los días en que se realizaban las pruebas, para evitar que fueran examinados, alerta ahora de que existen casos en que los centros educativos han amenazado con denunciar a estas familias por absentismo e incluso poner su situación en conocimiento de la Fiscalía de Menores.
«Es un intento falso para condicionar a las familias que sabemos perfectamente que los derechos del menor están por encima de cualquier otra consideración y nuestra decisión está guiada en el sentido de proteger ese derecho de nuestros hijos sobre los que tenemos la patria potestad», defienden desde CEAPA.
Asimismo, señalan que se ha «ninguneado» a las familias que han tomado esta decisión, pese a haberla comunicado al centro, «obligando» a niños a realizar las pruebas aprovechándose que estos «no podían manifestar sun opinión libremente» ante el profesor.
«Las reacciones del sistema educativo ante la decisión anunciada es la coacción y la amenaza y esto es algo que evidencia la necesidad de analizar las prácticas abusivas que se llevan a cabo hacia el alumnado y sus familias en muchos centros educativos», aseveran.
Por todo ello, solicita a las comunidades autónomas que aún no han puesto en marcha esta evaluación que respeten la postura de las familias que no quieran que sus hijos la realicen estas pruebas y les recuerda que Están en su «derecho» de evitar algo que consideran que «les puede perjudicar para el resto de su vida».
Esta confederación de padres, que representa a más de tres millones de familias de la enseñanza pública, ha manifestado en numerosas ocasiones su «rechazo frontal» a estas ‘reválidas’ porque, a su juicio, pueden «lesionar gravemente el futuro del menor» ante la posibilidad de incorporar a su expediente «connotaciones negativas que pueden llevarle incluso a repetir curso o a condicionar su futuro en Secundaria».
Galicia es la comunidad autónoma en que más alumnos no acudieron a clase los días en que se celebraron las pruebas de la LOMCE –11, 12 y 13 de mayo–. Según las organizaciones de padres que promovieron esta oposición a la prueba, más del 80% de los niños no fueron a clase para evitar que fueran evaluados.
El conselleiro gallego de Educación, Román Rodríguez, tras acudir al a la Conferencia Sectorial en el ministerio el pasado viernes, admitió la baja participación en la ‘reválida’ en su comunidad y llamó a reflexionar sobre esta campaña de «acoso y desinformación» promovida por partidos políticos y plataformas sociales.