Budapest, 11 sep (dpa) – Horas antes de presentarse ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo, el primer ministro de Hungría, Viktor Orban, mostró su desdén hacia la institución y afirmó que los legisladores ya tienen una opinión formada.
«En el Parlamento Europeo son mayoría los diputados pro-inmigración», señaló en un mensaje de video de menos de un minuto colgado en su página de Facebook.
«Ahora se disponen a vengarse de Hungría porque los húngaros han decidido que su país no será un país de inmigración», añade el político nacionalista de derechas. «La realidad es que la sentencia contra nosotros ya está escrita».
Orban se dirigirá esta tarde a los parlamentarios para hablar sobre un proceso abierto contra Hungría en base al Artículo VII de los Tratados de la Unión Europea (UE) y que fue iniciado por la diputada verde Judith Sargentini. En su documentación, la legisladora denuncia una «sistemática amenaza a la democracia, el Estado de derecho y los derechos fundamentales» en Hungría.
El miércoles, los eurodiputados votarán si ponen en marcha o no el Artículo VII, para lo cual se necesita una mayoría de dos tercios. En el peor de los casos, el proceso sancionador podría derivar en que Hungría pierda su derecho a voto en el Consejo de Ministros de la UE.
