Berlín, 25 jul (dpa) – Numerosas ciudades de Alemania fueron hoy nuevamente escenario de protestas contra la ofensiva militar de Israel en la Franja de Gaza, que ya se ha cobrado la vida de más de 800 palestinos.
En Berlín se produjo la mayor manifestación, con unas 1.200 personas que criticaron la intervención militar pero sin corear consignas antisemitas como las que se escucharon días atrás en muchas partes del país.
Anteriormente, la policía y la clase política alemana habían llamado a los organizadores de las protestas a impedir la propaganda antisemita.
El diario más leído del país, «Bild», salió hoy a la calle bajo el título «Nunca más odio a los judíos» con la condena de numerosas personalidades, incluida la canciller Angela Merkel, a cualquier forma de antisemitismo en el país responsable del genocidio judío en Europa.
La policía condicionó las manifestaciones: no se podía hacer apología ni llamar a asesinar, herir o secuestrar personas y tampoco se podía incendiar objetos.
El embajador de Israel en Alemania, Yakov Hadas-Handelsman, defendió en una contramanifestación en Berlín los ataques de su país a la Franja de Gaza. «Es nuestro derecho y nuestra obligación defendernos de las provocaciones».
También estaban programadas en horario vespertino manifestaciones anti-israelíes en Stuttgart, Hannover y Bonn, entre otras. Muchas protestas fueron convocadas con motivo del día de Al Quds (Jerusalén), una jornada de solidaridad con los palestinos instaurada en 1979 por el líder revolucionario iraní, el Ayatolá Jomeini.
Asimismo, federaciones islámicas se distanciaron de los insultos antisemitas. La comunidad kurda de Alemania advirtió que no se debe abusar del derecho de opinión para pregonar el antisemitismo.
«Siempre nos hemos distanciado de los ataques generalizados a judíos. Pero también debe ser posible poder criticar la política de Israel al igual que la de otros países», dijo en declaraciones a la emisora Deutschlandradio la secretaria general del Consejo Central de los Musulmanes en Alemania, Nurhan Soykan.
En la ciudad de Essen, la policía detuvo temporalmente a cuatro hombres de ascendencia extranjera sospechosos de haber amenazado con atentar contra una antigua sinagoga que es utilizada como centro cultural.
También hoy se supo de un ataque en Berlín a un joven que llevaba puesta una kipá, el típico casquete redondo de los judíos. Según informó la policía, un desconocido le pegó en la cara sin mediar palabra y le pisoteó las lentes que se le habían caído al suelo. El joven, de 18 años, huyó hacia una sinagoga cercana.
El politólogo judío franco-alemán Alfred Grosser acusó a Israel de chantaje. «Si se critica, siempre hay alguien que dice ‘Auschwitz’ y el otro tiene que callarse», dijo Grosser en declaraciones para la edición del sábado del diario «Schwäbische Zeitung». «Si toda crítica a Israel es antisemitismo, entonces yo también soy antisemita a pesar de ser un judío puro y duro».